El Deportivo da por cerrado el mercado salvo que encuentre un mediocentro óptimo

Un fin de semana frenético en los despachos y feliz desde el terreno de juego han colmado las expectativas del Deportivo en este mercado de invierno. El club, que había encarado la recta final del mes de enero con los únicos movimientos de la llegada de Eric Puerto y la marcha de Ian Mackay, ha satisfecho en apenas las últimas horas sus expectativas con los fichajes de los ansiados extremos derecho y delantero centro en las figuras de Luis Quintero y Raúl Alcaina. Ambos se han entrenado este miércoles junto a sus nuevos compañeros en la vuelta del equipo blanquiazul a los entrenamientos para la preparación del partido del próximo domingo (19.00 horas, TVG-2) contra el Fuenlabrada en Riazor.

Los refuerzos de estos dos futbolistas, unidos a la cantada incorporación del lateral izquierdo del Fabril Iano Simao como nuevo jugador del primer equipo, esta aún sin confirmar por parte del club, completarían el elenco de llegadas al Deportivo de cara a los meses decisivos del campeonato. Las tres operaciones se unen a la salida de Alberto Retuerta, que sigue entrenándose en Abegondo, pero con el que se negocia para rescindir el contrato que finaliza el próximo 30 de junio. Todo indica que acabará volviendo al Hércules de Alicante, donde militó cedido durante la segunda vuelta de la pasada temporada.

Esta última operación dejaría una única plaza libre en la plantilla deportivista, la de un jugador sub-23, a la expectativa de poner la guinda a la plantilla. Tras un mes de enero de cocción lenta, pero que ha acabado por colmar las necesidades detectadas desde un primer momento por el club, el Deportivo sigue atento al mercado en busca de la guinda de la plantilla.

Esta correspondería a un mediocentro que mejorase sustancialmente las posiciones que ahora mismo ocupan José Ángel Jurado y Diego Villares, titulares en las últimas jornadas, así como Salva Sevilla, que ha pasado de la titularidad a no gozar de minutos, y el fabrilista Rubén López. Salvo que abandonase el club un nuevo jugador mayor de 23 años, como al principio de mes sucedió con Mackay, esta incorporación tendría que encajar con la de un futbolista sub-23, pues la única ficha libre en la plantilla sería precisamente la que dejaría la marcha de Retuerta.

Cualquier otro refuerzo de un futbolista mayor de esta edad obligaría a dar salida a alguno de aquellos con que Idiakez cuenta menos. Todas las miradas se centran en Berto Cayarga y Pablo Valcarce, muy por debajo de las expectativas de sus respectivas llegadas y que llevan semanas en la rampa de salida. Sin embargo, ambos disponen de contratos que los ligan al Deportivo por lo que queda de esta temporada y la siguiente, así que su salida resultaría muy costosa.

El mercado de fichajes permanecerá abierto hasta las 23.59 horas de este jueves, día 1 de febrero, y hay alguna puerta abierta para que acabe llegando ese último fichaje, pero a nadie se le escapa que al Deportivo apenas le queda margen de maniobra.