Sufrimiento y sometimiento del Deportivo Liceo ante el Caldes (7-2)

Sin perder la fiabilidad y juego entretenido de otros años, el Liceo de esta temporada está apostando por buscar una mayor solidez defensiva en el cuatro para cuatro, aunque ello merme la espectacularidad que ofrecen los partidos de ida y vuelta. Copa no quiere sorpresas en los ataques pautados y está sabiendo sacar partido, incluso, aunque el rival disponga de más minutos de bola, algo que aun siendo un dato tangible, no define quién marca, en realidad, a qué se juega. El problema es cuando controlas esa faceta del juego, pero fallas en el momento en el que tú tienes la bola. Ahí pueden llegar rápidas transiciones, como le sucedió ante el Caldes, que te pueden poner contra las cuerdas. Pese a todo, ha aprendido a sobreponerse a los imprevistos y sumó su quinta victoria consecutiva de la OK Liga y seguir con plena garantía en puestos de Copa del Rey.

La acumulación de partidos —seis en apenas dieciocho días—, con desplazamientos incluidos y estancias lejos de sus domicilios es algo que no solo cansa física, sino psicológicamente. Si a eso le unimos que enfrente está un equipo teóricamente asequible como visitante, que llega con solo 1 punto de 12 a domicilio, el subconsciente se relaja y la tensión quizá no es la de otros compromisos.  Quizá una prueba es que en toda la primera parte, el Liceo cometió una única falta.

Con todo, como en anteriores citas, volvió a ponerse pronto por delante en el marcador, pues a los seis minutos, Dava ya había anotado el primero; incluso pudieron aumentar la distancia Nil Cervera y Jaco, con sendas bolas al hierro, antes de que Marc González aprovechara un descuido para empatar en el 14. Y ahí volvieron a ponerse las cosas a favor en apenas unos segundos, los que tardó Jaco en echarle descaro al asunto y meter un chut propio de César Carballeira para poner el 2-1 en el electrónico. Pero una contra volvió a igualar el partido a cinco del final del primer tiempo.

Así se llegó al descanso, con un Liceo no tan exquisito como en los últimos partidos y un Caldes ambicioso que demostró que, probablemente, merece más puntos como visitante de los que tiene.

Y en el entretiempo tocó mensaje de Copa, ajustar un par de conceptos y, sobre todo, despertar y no fiarse del rival. Dicho y hecho, en seis minutos, primero Bruno y después Dava, ponían, de nuevo, por delante al Liceo, en esta ocasión con dos goles de diferencia, algo que cambiaba muy, mucho, el desarrollo del duelo. A partir de ahí se vio otro partido, con un Liceo más relajado y un Caldes sometido. Ni siquiera la superioridad numérica que le proporcionó una falta directa cometida por el Tato Ferruccio sirvió a los catalanes para reducir distancias. Al contrario, fue el Liceo el que amplió la renta en dos ocasiones gracias a los goles de César, chutazo, cómo no, y Xaus.

Quedaban12 minutos pero el Liceo quería enmendar la pobre primera parte, así que no dejó de someter a un Caldes que, según pasaban los minutos y llegaban los goles, se encontraba con la cruda realidad que sitúa a un equipo en los primeros puestos y al otro de la mitad para abajo.

Ficha técnica

Liceo (7): Martí Serra, César Carballeira, Nil Cervera, Dava Torres, Tato Ferrrucio, —cinco inicial—, Arnau Xaus, Fabri Ciocale, NilCervera, Bruno Saavedra, Jacobo Copa y Martín Rodríguez Garaboa.

Caldes (2): Arnau Martínez, Biel Pujadas, Xavier Gurri, Adrià Ballart, David Gelmà —cinco inicial—, Marc González, Lluc Vila, Marcos Blanque, Héctor Sánchez.

Goles: 1-0, min 6: Dava Torres; 1-1, min 14: Marc González; 2-1, min 15: Jaco; 2-2, min 20: David Gelmà; 3-2, min 27: Bruno; 4-2, min 31: Dava; 5-2, min 36: César; 6-2, min 37: Arnau Xaus; 7-2, min 47: Arnau Xaus.

Árbitros: Rubén Fernández y David Calongue

Incidencias: Encuentro correspondiente a la décima jornada de la OK Liga, disputado en el Palacio de los Deportes de Riazor ante unos mil espectadores