El puente más largo de agosto deja las calles desiertas y sitio para aparcar

vigo | «Cerrado. Nos vemos el próximo lunes día 20». Es el texto que reza en uno de tantos carteles que, desde el pasado martes, cuelgan en muchas de las tiendas de la ciudad.

La festividad de la Asunción, sequida de San Roque el jueves, ha provocado uno de los mejores puentes del año y, sin duda, el más largo del verano. Comercios, bares, cafeterías e incluso algún restaurante han decidido tomarse un respiro y cogerse unos días de vacaciones en mitad del mes de agosto. Está claro, a nadie sienta mal un tiempo de descanso en el ecuador del verano.

Desde el pasado miércoles 15, día en que muchos vigueses abandonaron la ciudad para iniciar su particular «operación salida», las calles quedaron vacías, tanto de peatones como de vehículos. La tradicional estampa del tráfico atascado en la calle García Barbón en horas punta no se ha repetido estos días. El tráfico es fluido y casi nadie pasea por la calle por las mañanas.

También han desaparecido las dificultades para aparcar en zonas céntricas como la calle Rosalía de Castro o Pi y Margall. Llegar con el coche y encontrar sitio no está siendo un problema esta semana, ya que en menos tiempo del que se tarda en dar una vuelta a la manzana, ya se ha quedado alguna plaza libre.

Los aparcamientos de Puerta del Sol, Areal y Colón mantienen el cartel de «libre» durante todo el día y las siempre abarrotadas terrazas de Montero Ríos muestran una estampa un tanto extraña con mesas vacías a la hora del aperitivo.

Los empresarios del sector de la hostelería apuntan que el causante de la diáspora han sido las bajas temperaturas, ya que muchos turistas han abandonado la ciudad antes de tiempo.