Una goleta de leyenda recala en Baiona
Vigo
19 Oct 2010. Actualizado a las 02:00 h.
Un barco para llevar a los adolescentes suizos en la buena dirección. No hay mejor terapia ni plan de reinserción que invitar a los jóvenes con problemas a vivir una experiencia que no olvidarán en sus vidas viajando por el mundo y aprendiendo a trabajar y a vivir en equipo.
La deslumbrante goleta de cien años de antigüedad que preside desde el sábado pasado la bahía de Baiona persigue ese objetivo. Es el Salomón , un buque escuela de bandera suiza de tres palos y cuarenta metros de eslora. Trae a seis tripulantes y a doce cadetes con edades comprendidas entre los 14 y los 17 años, entre ellos un coruñés afincado en Suiza, Benjamín Bolai . El navío partió el pasado mes de septiembre desde Alemania y ha tocado puertos de Holanda e Inglaterra antes de recalar en la ensenada de la Real Villa, donde compite en belleza con la réplica de la Carabela Pinta, aunque a esta última ya le hace falta una mano de pintura.
La embarcación zarpa a las once en punto de hoy hacia el Algarve, en Portugal, donde permanecerá atracada durante todo el invierno preparándose para afrontar las Azores.
Los jóvenes aprendices aprovecharán esos meses para poner la nave a punto, pintarla y hacer reparaciones, después de un año de continua navegación tras haber cruzado el atlántico desde Panamá y atravesado las islas de Cabo Verde. Los cadetes viven así una experiencia única en la que están aprendiendo todos los secretos del mundo de la navegación de una manera práctica, pero también a convivir y a profundizar en el respeto al prójimo. Esta aventura que durará 40 semanas supone una apuesta pedagógica del gobierno suizo para inculcar valores a adolescentes que atraviesan situaciones difíciles en sus vidas.
Se levantan todos los días a las siete y media de la mañana y siguen unos horarios de trabajo muy estrictos. Pero siempre hay tiempo para poder darse un buen chapuzón en el agua. Algunos de ellos lo hacían ayer a las nueve de la mañana, saltando desde la cubierta y desafiando al frío gracias a que el mar estaba en calma.
La goleta fue construida hace un siglo para desplazarse a través de los canales de Holanda, donde se utilizó durante décadas para el transporte de mercancías, especialmente de pescado. Entonces era una enorme barca para pasar sin dificultad por debajo de los puentes.
Pero mucho tiempo después sus propietarios decidieron darle otro uso y destinarlo a la navegación marítima y le pusieron mástiles y velas que le dan su aspecto de goleta.
El capitán se llama Patrick Graeniche r y explica que siempre que pueden navegan empujados por la fuerza del viento. Así han llegado desde el puerto británico de Falmouth, sin consumir ni un solo litro de combustible. Y si los vientos son favorables esperan llegar pronto al sur de Portugal, aunque todavía hoy los baioneses podrán seguir disfrutando durante unas horas de la visión de un magnífico velero presidiendo su ría. Vigo é cor. El Centro Cultural Caixanova acoge desde hoy la exposición Vigo é cor, incluida en los actos conmemorativos del bicentenario de la concesión a Vigo del título de ciudad. Treinte y cinco artistas han pintado «a alma da cidade», algunos de forma directa y otros indirectamente. La nómina es de lujo y abarca a nombres tan importantes como Darío Álvarez Baso, Menchu Lamas, Antón Lamazares o Pulido. La exposición se podrá ver hasta finales de noviembre. La mayor parte de las obras fueron creadas expresamente para la muestra.