El Concello de Vigo presenta el recurso contra la retirada de la cruz franquista de O Castro

El Ayuntamiento de Vigo ha presentado un recurso contra la sentencia del Juzgado de lo Contencioso Administrativo 2 de la ciudad olívica que ordena la retirada inmediata de la cruz de O Castro por considerarla un monumento franquista.

El recurso, que ha sido presentado a última hora del lunes, en el límite del plazo de 15 días que tenía la corporación viguesa, concluye que la cruz «está incorporada a la ciudad» y que «no existe un sentimiento generalizado de que sea de exaltación del franquismo».

Considera «indicativo» que los vigueses no se refieran a la misma popularmente como la cruz de los caídos sino como la cruz de O Castro.

La argumentación coincide con el mensaje transmitido desde el principio por el alcalde, el socialista Abel Caballero: se trata de «una simple cruz», que «no conmemora ni enaltece nada por sí misma».

Alude al acuerdo unánime del Pleno de Vigo de 1981 por el que se retiraron los elementos accesorios de simbología fascista y se le confirió a la cruz un «valor trascendental de reconciliación».

«Desproporcionado»

El recurso considera el derribo «desproporcionado y contrario a los criterios seguidos por la comisión técnica de expertos de la Ley de Memoria Histórica» en otros casos similares como la cruz de la plaza de la Constitución de Córdoba.

También alude a sendas sentencias que ordenan, en un caso restituir y en otro mantener, sendas cruces en Mota del Cuervo, en Cuenca.

Con todo, muestra la predisposición del gobierno local a retirar los relieves de un marino y un soldado y los emblemas de bronce de los tres ejércitos en el frontispicio, separado por un desnivel de más de 30 metros de la cruz, si su presencia supone exaltación de algún tipo.

La presentación del recurso se produjo horas después de que PSOE y PP sumaran sus votos para rechazar una moción del BNG que pedía el cumplimiento de la sentencia que ordena el derribo de la cruz, y de que el sector crítico de los socialistas vigueses instaran al secretario general, Pedro Sánchez, y al regional, José Ramón Gómez Besteiro, a que lo impidieran.

Durante el debate en el Pleno, la portavoz nacionalista, Iolanda Veloso, criticó la reticencia de un alcalde socialista al cumplimiento de la Ley de Memoria Histórica aprobada por su partido, y proyectó imágenes del NO-DO sobre la inauguración del monumento por parte del caudillo.

Abel Caballero replicó que estuvo en la cárcel y padeció el exilio durante la dictadura, mientras «otros hablan mucho e hicieron poco».

Declaraciones del obispo

El PP, por su parte, señaló por medio de su portavoz, José Manuel Figueroa, que «no entra en debates que pretendan dividir a los vigueses» y defendió que «se debe seguir el procedimiento correspondiente», es decir, la presentación del recurso.

Entretanto, el obispo de Tui-Vigo, Luis Quinteiro, antepuso la simbología de la cruz como icono de «reconciliación y perdón» a otras connotaciones en respuesta a una petición de IU de que mediara para evitar el recurso del Ayuntamiento.

El obispo recalcó en su escrito que nunca dejará de «intentar que todos, creyentes o no creyentes», traten de «descubrir y respetar» el sentido cristiano de la cruz como «símbolo supremo de reconciliación y perdón».