La defensa de Figueroa pide el sobreseimiento por tráfico de influencias en la Operación Pato
Vigo
Sostiene que el edil no recibió regalos de Eiriña y que «hacía años» que había dado instrucciones de rechazar obsequios
23 Jan 2017. Actualizado a las 17:56 h.
La defensa del concejal del PP vigués y ex vicepresidente de la Diputación de Pontevedra, José Manuel Figueroa, ha presentado un escrito en el juzgado de instrucción número 7 de Vigo en el que solicita el sobreseimiento y archivo parcial de la causa (conocida como Operación Patos) con respecto a su representado, al entender que no hay indicios que permitan mantenerlo como investigado por un supuesto delito de tráfico de influencias o por haber recibido regalos de la constructora Eiriña.
En el escrito, al que ha tenido acceso Europa Press, la representación de Figueroa recuerda que el concejal tiene la condición de investigado por su supuesta vinculación con la adjudicación de las obras realizadas por la Diputación de Pontevedra en el campo de fútbol de Coia, en Vigo.
A ese respecto, ha recordado que esa actuación tuvo como base la firma de un convenio entre la institución provincial y la Federación Española de Fútbol, que Figueroa no suscribió.
Asimismo, ha indicado que tampoco participó en la mesa de adjudicación de la obra y que los técnicos de la Diputación interrogados al respecto en la fase de instrucción negaron haber recibido presiones del entonces vicepresidente del ente provincial para conceder esa obra a Eiriña.
Supuesto regalo
Con respecto a la supuesta recepción de un reloj, obsequio de la constructora, en las Navidades de 2010, la defensa recuerda que, no solo lo ha negado el propio Figueroa, sino que ninguno de los trabajadores de la empresa ha corroborado ese extremo.
De hecho, ha incidido, en su declaración como investigado, el ex vicepresidente de la Diputación negó haber recibido obsequio alguno por parte de la empresa de Enrique Alonso Pais, y aseveró que «hacía años había dado instrucción de no recibir ningún tipo de regalo».
Además, en el escrito también se hace referencia a un auto de la propia jueza de instrucción (dictado con motivo de una petición policial para hacer una entrada y registro en la Diputación), en el que ésta reconoce que las menciones a Figueroa en las conversaciones telefónicas intervenidas son «meras alusiones vagas o indefinidas».