Povisa aplica una técnica para tratar la disfunción eréctil sin viagra
Vigo
El hospital vigués utiliza ondas de choque, que logran mejorías en el 85 % de los casos
14 May 2022. Actualizado a las 00:45 h.
El Hospital Povisa de Vigo ha empezado a aplicar un nuevo tratamiento para la disfunción eréctil, que busca evitar que los pacientes tengan que tomar medicación (la viagra u otros) para conseguir una erección. Se trata del uso de ondas de choque, que son ondas de sonido que se aplican directamente sobre el pene para combatir problemas vasculares y restaurar de manera duradera la capacidad de tener erecciones. Según el centro sanitario, del Grupo Ribera Salud, tiene una eficacia del 85 %.
El especialista José Luis Quintana, del servicio de urología, explica que el tratamiento concreto depende de cada paciente y de sus problemas. En general, las ondas de choque se aplican en sesiones de media hora, una vez a la semana. En promedio, los pacientes reciben siete sesiones, aunque en función de la patología y de la respuesta pueden ser más o menos. «Siempre tenemos una mejoría. Algunos hombres que tienen disfunción y toman la pastilla dejan de tomarla después del tratamiento. Otros que la toman y no les funciona, gracias al tratamiento la siguen tomando pero sí les funciona», detalla. Los resultados suelen depender «del tiempo de evolución de la disfunción».
A principios de este año el hospital incorporó una nueva máquina que permite aplicar las ondas de manera focal, en un punto específico, con la profundidad e intensidad que se necesitan en cada caso. «Antes se utilizaban aparatos más sencillos, había ondas radiales (no focales) o producidas con electricidad», explica el especialista. La tecnología ha avanzado y permite aplicar tratamientos más específicos. «Esta nueva tecnología utiliza cristales piezoeléctricos; son ondas pequeñas que se acumulan para crear una mayor», dice Quintana. Las ondas de sonido producen una cavitación, que es como un vacío, que resulta beneficiosa para tratar problemas vasculares. También se utiliza en la enfermedad de Peyronie (que provoca erecciones curvas y mucho dolor), una dolencia para la que puede ser necesaria la cirugía, que en este caso se evita.
A diferencia de la viagra, este tratamiento no es para un momento concreto, sino que busca conseguir un efecto duradero. Después, el éxito depende de cada caso, tanto de la patología como del tiempo de evolución de la disfunción. En Povisa explican que hay pacientes que consiguen resolver la disfunción eréctil mientras que otros necesitan repetir el tratamiento. El hospital asegura que el tratamiento no tiene efectos secundarios. «Tiene más efectos secundarios tomar la pastilla que las ondas de choque», explica el especialista del servicio de urología.
El tratamiento no necesita anestesia. El paciente llega, se le aplican las ondas en consulta y después se marcha a su casa. No necesita ninguna preparación específica.
Hay muchas causas que llevan a la disfunción eréctil. Una es la edad. A partir de los 50 años, uno de cada diez hombres la padece, aunque no siempre aparezca otra causa determinante. Pero sí las hay. En general, las enfermedades como la hipertensión, el colesterol, la diabetes o la obesidad, favorecen la aparición de la disfunción eréctil. «El tabaco también influye muchísimo», asegura Quintana. Por lo tanto, la mejor prevención es llevar una vida sana.