El juzgado declara el concurso de acreedores de Hiperxel, con 102 tiendas en Galicia

El Juzgado de lo Mercantil número 3 de Pontevedra ha declarado el concurso de acreedores solicitado por Xeldist Congelados de modo voluntario. La matriz que explota la marca de Hiperxel no ha aguantado más y solicitó el jueves por la tarde el procedimiento judicial tras reconocer su insolvencia. El auto concursal aclara que, por ahora, no se ha solicitado la fase de liquidación. La cadena minorista de congelados cuenta con 102 tiendas en toda Galicia. A la espera de la llegada de un administrador nombrado por la justicia, la plantilla arrastra varias nóminas sin cobrar.

La situación de insolvencia actual no le permite a la empresa hacer frente a las obligaciones de pago pendientes. En la solicitud del concurso, Xeldist no achaca a un acontecimiento concreto la crisis, sino que apunta a un cúmulo de factores de índole externa e interna. Así, menciona «la merma de la capacidad adquisitiva de los hogares», «la caída general del consumo de pescados y mariscos congelados» o «la imposibilidad de acceso a dinero nuevo en los principales mercados bancarios y financieros» como causas de su deriva. Fruto de la responsabilidad empresarial, el auto señala que «la fusión por absorción de la sociedad Xeldist con la entidad Congelados Cíes (de A Coruña) provocó que se lastrara la actividad de la deudora con incremento de costes». Sobre esto último, la solicitante del concurso apunta que su intención era la de producir sinergias entre ambas sociedades dedicadas a la venta al por menor.

La caída de las ventas motivada por la pérdida de confianza de los clientes, las dificultades de aprovisionamiento y la falta de liquidez que redujo el gasto en publicidad son los motivos restantes que alega Xeldist para solicitar el concurso.

La pesquera viguesa Iberconsa fundó Xeldist Congelados en el año 1988. Figura como uno de los grandes hitos comerciales de la empresa de congelados que capitanea Alberto Freire. En el 2021, la empresa madrileña Vinova Investments, que ya era propietaria de Congelados Cíes, adquirió la matriz de Hiperxel. El fondo Certior apoyó económicamente esta fusión. Sin embargo, los resultados desde la adquisición no fueron los deseados. En el 2021, Xeldist redujo su facturación hasta los 25 millones de euros y registró un millón en pérdidas.

Fue a finales del 2022 cuando Casalnova, empresa de Bergondo, salió al rescate de Xeldist. La distribuidora coruñesa adelantó mercancía por valor de 1,5 millones de euros para la última campaña de Navidad y comprometió otras dos para el 2023. Los gestores de Casalnova admitieron que entraron en esta operación en parte por el empeño de no dejar a la deriva una empresa gallega que es la segunda a nivel nacional en su sector y que da empleo a muchas familias en toda la comunidad. Los fondos Resilience Partners y Certior aportaron otra inyección de capital. Ambos fueron los que presentaron el proyecto a Casalnova.

Último ejercicio

A la espera de conocer los resultados del 2022, el auto de solicitud del concurso de acreedores expone que en este ejercicio la deudora presentó un patrimonio neto negativo, «lo que tensionó la tesorería de Xeldist y su estado de insolvencia actual». El documento también avanza que la nueva concursada tendrá intervenidas las facultades patrimoniales durante la fase común, en la que habrá un control de bienes.