Coldplay arrasa a 236 kilómetros de Galicia

No pocos gallegos (difícil saber la cifra) se están desplazando 236 kilómetros al sur de la frontera para disfrutar de los conciertos de Coldplay en la ciudad lusa de Coimbra. Es lo más cerca que la banda británica más exitosa de los últimos años ha estado jamás de Galicia (sí, Chris Martin cantó en la boda de Marta Ortega en Arteixo, pero eso fue otra historia).

Por supuesto, el estadio se abarrotó ya en la primera cita del jueves. Unos 50.000 espectadores asistieron embelesados al show de la gira Music Of The Spheres, con largas colas de fans desde primera hora de la mañana.

El concierto comenzó puntual, a las nueve y media de la noche, con el tema Music of the Spirits. Fue después de que tres jóvenes diesen un discurso de concienciación medioambiental y a favor de las energías renovables.

En la entrada se entregaron a los asistentes las ya famosas pulseras que había que devolver a la salida para reciclar. El encendido de las mismas no lo activaba el público, sino el equipo técnico del concierto. Cuando sonó Human Heart se iluminaron las de una grada formando la imagen de un gran corazón, y cuando comenzaron los acordes de Yellow todas se volvieron de color amarillo.

El impacto visual forma parte de un espectáculo de una hora y 45 minutos de duración, aderezado con cervezas y bolinhos de chouriço. Todo estaba organizado al detalle. El cantante Chris Martin, maestro de ceremonias idolatrado, pidió a los asistentes que se olvidasen de los móviles durante cinco minutos y que se limitasen a vivir el momento mientras tocaban A Sky Full of Stars. «Somos un grupo de gente llegado de Oporto, de Lisboa, de Coimbra, de España...». Y así el viernes, el sábado y hoy. Con casi 200.000 entradas vendidas.