Atunlo, la mayor comercializadora española de atún, entra en preconcurso de acreedores

Atunlo está en preconcurso de acreedores. La compañía líder en la comercialización de túnidos en España, con sede en Vigo y fábricas en Cambados y O Grove, se ha acogido a la ley concursal para aliviar su estado de tesorería y ante la imposibilidad de afrontar en estos momentos sus gastos corrientes, según confirman fuentes de la empresa. Durante la celebración de la feria Conxemar, hace menos de un mes, directivos de la pesquera admitieron «algún impago», pero advirtieron que la situación financiera estaba lejos de una quiebra.

La comercializadora de atunes ha comunicado al juzgado mercantil que activará el mecanismo que le da un plazo de tres meses para renegociar la deuda con sus acreedores. Una medida de la que Atunlo ha informado esta tarde por escrito a los representantes sindicales de las plantillas de sus respectivos centros de trabajo, adelantándoles la intención de materializar un plan de reestructuración del pasivo de la compañía. Si en el plazo de esos tres meses la situación no mejora, la suspensión de pagos será automática y un administrador concursal se hará cargo de la firma. Desde el Tribunal Superior de Xustiza de Galicia (TSXG) aseguran que el juzgado no ha recibido todavía la comunicación oficial, pero fuentes de la empresa explican que ya se ha trasladado, por lo que se espera que el juzgado la reciba en breve.

En el escrito a la representación sindical de la plantilla, la dirección de la compañía atribuye el empleo del preconcurso de acreedores «a las tensiones de tesorería que atraviesa Atunlo, como consecuencia de la situación actual del mercado». Un estado de cosas que obliga al grupo a «iniciar un proceso de reorganización de su pasivo a efectos de garantizar su viabilidad en el corto y medio plazo».

Un plan centrado en el pasivo

La dirección de Atunlo ha comunicado a la plantilla que el plan de reestructuración en el que se trabajará bajo el paraguas del preconcurso de acreedores «afectará en esencia a la estructura del pasivo». Es decir, se centrará en apuntalar la compatibilidad del pago de la deuda de la sociedad y el mantenimiento de su actividad y negocio, no en la venta de activos. En esta línea, se añade en el comunicado que «la intención del órgano de administración es que, de adoptarse medidas operativas imprescindibles para la reestructuración, estas impacten lo menos posible en los trabajadores», para añadir que «lo anterior no impactará en el desarrollo de la actividad de Atunlo, que se realizará con normalidad como hasta ahora». La compañía facturó 221,56 millones de euros en el 2022 y obtuvo 1,13 millones de beneficio. En el 2023 estrenó unas instalaciones en O Grove para la hacer aceite a partir de cabezas de atún.

Reuniones y nóminas al día

La dirección de Atunlo ha trasladado a los comités de empresa de sus diferentes centros de trabajo que a finales de semana mantendrá las reuniones informativas que desde la CIG y CC.OO. le habían solicitado hace ya varios días ante los crecientes rumores en el sector. Mar Vila, responsable de la Federación Galega de Alimentación, Mar, Transporte e Telecomunicacións de la CIG en O Salnés, informa de que la empresa acaba de abonar las nóminas del mes de octubre y está al día en los pagos.

Atunlo se suma a una lista de pesqueras con una coyuntura financiera delicada, como Fandicosta y Actemsa. La líder en túnidos dispone de tres meses para mejorar su salud económica, ganar liquidez y llegar a acuerdos con sus acreedores, que no podrán solicitar el concurso de la compañía ni tampoco «iniciar ejecuciones judiciales».