Rodrigo Germade, Carlos Arévalo y Carolina García acudirán también a la Copa del Mundo montados en el K2 500, del que se cae Teresa Portela
Cangas
El cangués y la pontevedresa ganaron sus finales en el selectivo de Trasona formando pareja con Marcus Cooper y Sara Ouzande
13 Apr 2023. Actualizado a las 13:15 h.
La segunda jornada de los Trials Olímpicos, el proceso con el que la Real Federación Española de Piragüismo criba esta semana los palistas con los que acudirá a una Copa del Mundo de Szeged de la que saldrá su equipo para el Mundial de Duisburgo, volvió a contar con tres gallegos entre los nombres propios del día. Tras conseguir ayer miércoles plaza en los K4 500, el cangués Rodrigo Germade, el betanceiro Carlos Arévalo y la pontevedresa Carolina García se agenciaron esta mañana en el embalse asturiano de Trasona sendos billetes en un K2 500 para el que no se logró clasificar Teresa Portela. Germade y García firmaron su pase, además, como contundentes ganadores de sus respectivas finales directas, en ambos casos explosivas aún con un fuerte viento de cara para todos en el agua.
La primera regata con premio de la jornada fue la del K2 500 Mujer. El gallego Daniel Brage, responsable del grupo nacional de kayak sénior femenino que desde finales del 2021 trabaja en el Centro Galego de Tecnificación de Pontevedra con el objetivo de copar las tres plazas de la especialidad en los Juegos Olímpicos de París 2024, dio otra muestra de su nueva y fuerte apuesta por Estefanía Fernández. El relevo de Laia Pèlachs por la extremeña en el K4 500 pareció no notarse el miércoles en Trasona, pero hoy su K2 con Teresa Portela finalizó tercero en el selectivo, quedando fuera de la Copa del Mundo. Tras una salida explosiva de Míriam Vega y Bárbara Pardo, Carolina García y la asturiana Sara Ouzande, esta última compañera de Portela en la plata mundial en el K2 200 el año pasado, tomaron el control de la final a los cien metros, para no soltarlo. Tras haber formado pareja antes del 2022, García y Ouzande probaron su mayor acoplamiento y, con la novedad de ver a la gallega en la marca del barco, ganaron con autoridad en 1.51,001. Otra dupla ya bien acoplada y con palmarés europeo, la formada por la catalana Laia Pèlachs y la vasca Begoña Lazcano, se hicieron con el segundo pasaporte para Szeged a 430 milésimas de segundo (1.51,431) de García y Ouzande, con Fernández y Portela terceras a 1,123 de las ganadoras (1.52,124).
La final del K2 500 Hombre parecía más una regata por el podio de una gran cita internacional que la de un selectivo nacional. Cerca de una decena de medallistas y campeones olímpicos y del mundo en diferentes barcos y distancias se alinearon a la par en las siete calles ocupadas en la línea de salida. Y la calidad en el agua y lo mucho en juego, sabedores los presentes que de los dos barcos clasificados para la Copa del Mundo de Szeged saldrá el que en agosto pelee en el Mundial por clasificar a España para los Juegos Olímpicos de París, se materializaron en una regata extremadamente intensa, reflejada en los tiempos finales, sublevados frente al viento frontal en Trasona. Con todo, el balear Marcus Cooper y el cangués Rodrigo Germade se mostraron intratables en cuanto su ritmo imponente anuló la salida explosiva de sus compañeros del K4, Carlos Arévalo y Saúl Craviotto, con el catalán cediendo la marca de la embarcación al betanceiro.
Hasta un barco de distancia llegaron a sacar a sus perseguidores durante bastantes metros Cooper y Germade, campeones del mundo de K2 500 en el 2021 escasas semanas después de su plata olímpica en el K4 500. Su tiempo en meta, 1.36,415. Un acelerón final en los 20 últimos metros y su crono de 1.36,572 concedió a Arévalo y Craviotto la segunda plaza para la Copa del Mundo de Szeged, rebasando como un relámpago con su esprint final a Carlos Garrote y Lázaro López, terceros en 1.37,125, y a Pelayo Roza y Enrique Adán, que tras parecer los mejor colocados para acompañar a Cooper y Germade a un suspiro de la llegada, acabaron relegados al cuarto puesto en 1.37,480.