Piden 17 años de cárcel para el supuesto asesino que mató de 80 cuchilladas a un huésped en un hostal de Mondariz
Mondariz
Días antes el acusado amenazó a la víctima: «Te voy a pasar por la piedra». La Fiscalía sospecha que pudo sufrir una alteración psíquica en el momento del crimen
13 Apr 2023. Actualizado a las 23:49 h.
La Fiscalía pide 17 años de prisión para un hombre acusado de asesinato y que, el 17 de enero del 2021, presuntamente mató de 80 o 90 cuchilladas a otro huésped que se alojaba en un hostal de Mondariz, en la provincia de Pontevedra, donde el imputado se alojaba también. Lo atacó con un cuchillo de cocina que compró días antes en Ponteareas. Aunque el crimen parece planificado, la Fiscalía admite que el acusado podía estar bajo los efectos de una enajenación mental que le impedía parcialmente controlar su voluntad aunque no llegó a perder el entendimiento, pues tras el crimen se encargó de esconder al moribundo en un sótano y abandonarlo a su suerte. El juicio se celebrará en la Audiencia Provincial de Pontevedra mediante el procedimiento del tribunal de jurado.
Por ese motivo, la Fiscalía considera que se trata de un delito de asesinato (el implicado actuó con premeditación y urdió el crimen días antes porque compró un cuchillo). Sin embargo, beneficia al acusado con una atenuante de alteración psíquica parcial, lo que a efectos prácticos le supone una rebaja en la petición de pena.
El acusado y la víctima eran los únicos huéspedes de un hostal en Mondariz, y mantenían una mala relación de vecindad. La víctima contó que el acusado ponía música a gran volumen de madrugada, daba golpes en la pared y le pedía tabaco.
La víctima era un cliente habitual que llevaba 17 años viviendo en el hostal y se quejó varias veces a la dueña de la conducta del acusado. Este, enojado, le espetó al otro huésped que lo había «jodido» y que lo iba a «pasar por la piedra».
El 9 de enero de 2021, el acusado compró un cuchillo de cocina en un bazar de Ponteareas, con unas características que, según el informe forense, son compatibles con entre 80 y 90 lesiones incisas por arma blanca que presentaba el cadáver. El crimen ocurrió entre el 17 de enero, la última vez que la víctima fue vista, y el 22 de enero, cuando apareció su cadáver en un sótano.
El acusado fue diagnosticado hace años de psicosis esquizofrénica paranoide y tuvo varios ingresos hospitalarios. Tiene dificultades para seguir el tratamiento que debe recibir de modo crónico.
Además de los 17 años de cárcel, la Fiscalía pide un alejamiento de 23 años de los familiares de la víctima y que los indemnice.