La banda de los peajes vuelve a la carga con dos nuevos asaltos en O Porriño tras entrar en la autopista andando

La banda de los peajes, grupo dedicado a asaltar cajeros de cobro automáticos en las autopistas AP-9 y AG-57 gallegas, ha vuelto a dar señales de vida tras congelar su actividad desde finales de marzo. Dos nuevos golpes asestados en sendas áreas de peaje de O Porriño de la autopista Ferrol-Tui, evidenciaron la semana pasada que la banda sigue activa y que opera en la misma zona en la que surgió el pasado enero. Son ya nueve los golpes que acumulan, cinco en total en las cabinas porriñesas, tanto en el tronco principal de la autopista, como en sus carriles de salida.

La reaparición de la banda se produjo en la noche del martes 25 de mayo, y volvió a la misma zona en uno de los ramales de la AP-9 en la localidad pontevedresa en la madrugada del lunes 31 del mes pasado. Robaron en una de las máquinas en cada ocasión tras reventar el dispositivo en el que se ubica el cajetín.

Alto riesgo, bajo botín

Fuentes de la investigación que sigue la Guardia Civil señalan que la cantidad robada fue escasa, lo que contrastaría con el alto riesgo contraído en la operación, al producirse con reiteración en el mismo punto, sembrado además de cámaras para recoger el paso de los coches y obtener una prueba gráfica de aquellos que no abonan el peaje.

Los asaltantes operan con capuchas y pasamontañas, y en esta última ocasión actuaron dejando su vehículo fuera de la autopista para desplazarse a pie hasta los cajeros. Tras reventarlos, los integrantes de la banda volvieron a la carrera a su coche y abandonaron el lugar a toda velocidad. Fuentes consultadas estiman que los ladrones tratarían de evitar circular por la autopista para no ser interceptados por la Guardia Civil, si es alertada tras activarse la alarma en caso de ser vistos desde el centro de control de Audasa a través de las cámaras.

En una de las ocasiones en las que el peaje de O Porriño fue asaltado, una trabajadora de la concesionaria pudo observar desde un edificio de la empresa próximo al vial cómo actuaban los ladrones. Los puntos elegidos por la banda no suelen contar con personal de la concesionaria durante la noche, no coincidiendo con ningún cobrador de servicio hasta ahora.

Además de los cinco asaltos a los puestos de O Porriño, la misma banda ya ha actuado también dos veces en la salida de Moaña de la AP-9, y otras dos en la AG-57 (Vigo-Baiona) en las salidas hacia Gondomar. Todos los golpes se han producido por tanto en el sur de la provincia de Pontevedra, lo que apuntaría a una cercanía residencial de sus integrantes. Las investigaciones apuntan también a que los asaltos se llevarían a cabo con coches robados.

Las concesionarias de las dos autopistas, pertenecientes ambas al grupo Itínere, han presentado idénticas denuncias tras cada uno de los nueve golpes de los que hay constancia, sin que la empresa se haya manifestado hasta ahora públicamente sobre la oleada que sufren.