Las vacaciones coruñesas de Kiko Rivera e Irene Rosales

Martín Bastos

SOCIEDAD

Irene Rosales y Kiko Rivera junto a sus hijas en las playas de Cádiz el pasado mes de mayo
Irene Rosales y Kiko Rivera junto a sus hijas en las playas de Cádiz el pasado mes de mayo Leandro Wassaul | Europa Press

La pareja ha visitado la torre de Hércules y el castillo de Santa Cruz, entre otros lugares

01 ago 2021 . Actualizado a las 10:31 h.

Kiko Rivera e Irene Rosales han decidido huir del calor del sur, en busca del ambiente fresco y el verde del norte. La pareja lleva unos días disfrutando del clima primaveral en A Coruña, junto al hijo que tuvo con Jessica Bueno y sus dos hijas en común. En la ciudad han disfrutado de tiempo con algunos amigos y también de los paisajes y monumentos más conocidos. Han visitado la torre de Hércules, el paseo marítimo y también las inmediaciones del castillo de Santa Cruz, en Oleiros.

Y además del fresquito, Kiko Rivera e Irene Rosales, cuyo año precisamente no ha sido fácil con el conflicto por la herencia que mantiene con su madre, Isabel Pantoja, han disfrutado también de la gastronomía gallega. Como ellos mismo han compartido en las redes sociales, han comido en dos conocidos restaurantes de las inmediaciones de la playa de Riazor, disfrutando de la carne de ternera o las cañitas fritas.

Incluso la propia Irene Rosales ha colgado una foto suya con el título «aire puro» posando frente al mar en un prado verde, con la ciudad al fondo, y donde se puede ver la zona portuaria de A Coruña.

Además, Kiko Rivera no ha perdido la oportunidad de dedicarle a su mujer unas emotivas palabras, ya que ha sido su gran apoyo en los últimos meses. «Hoy quiero dedicar mi post a la mujer de mi vida. Madre, mujer y amiga. 3 en 1 y todas perfectas. Gracias por existir @irenerova24 por darme lo mejor de mi vida que son mis hijas y por salvarme cuando todo estaba hundido. Por siempre tuyo. Te amo», escribía junto a una imagen de su esposa.

Está claro que Kiko Rivera tiene especial querencia por estas tierras. Hace apenas unas semanas viajaba a Xove para acudir al cumpleaños del presentador Roberto Vilar, y aseguraba que «Viveiro es uno de los pueblos más bonitos que he visto», aseguraba en las redes sociales. Y no es de ahora, hace años, antes de su boda con Irene, vino a celebrar su despedida de soltero en una casa rural de Boimorto junto a varios amigos.

Unos meses convulsos

«No perdonaré a Kiko otra infidelidad», decía Irene Rosales en la revista Lecturas de esta semana. En una entrevista se sincera y hace balance de los últimos meses, muy duros para ella. No han sido precisamente años fáciles para ella. En menos de doce meses perdió a sus padres, primero su madre víctima de un cáncer, y después a su padre, que llevaba décadas enfermo tras un accidente laboral. Con menos de treinta años se quedó completamente huérfana. 

A ello se ha sumado una continua exposición mediática por ser su marido hijo de Isabel Pantoja y Paquirri y vivir envuelto a todo tipo de disputas familiares. Con su hermana Isa, con su madre, con su tío Agustín, con su prima Anabel... La lista parece inabarcable. Y a eso se suman los rumores de supuestas deslealtades a su mujer y la sombra de una recaída en sus adicciones. «Que me ha podido ser infiel, sí. Es una cosa de él y mía. Si perdono, olvido; si no, estaría viviendo un auténtico infierno», reconoce en la revista. 

«Me duele que en el pero momento de mi vida, que no tengo ni padre ni madre, Isabel hable mal de mí. Quería ver en ella la protección de una madre», explica. «"¿Por qué no llevé a mi madre a un médico antes?", me preguntaba. Si mi madre no hubiese fallecido, mi padre tampoco, el murió de pena», dice. 

Con tantos frentes abiertos, a ver si durante su escapada coruñesa, la pareja encuentra un poco de paz y tranquilidad, que buena falta les hace.