Regístrate gratis y recibe en tu correo las principales noticias del día

La emigración por Alberto Martí

Ana Lorenzo Fernández
Ana Lorenzo A CORUÑA/LA VOZ.

A CORUÑA

La Barrié de A Coruña inauguró la muestra «Os adeuses», formada por fotografías sobre el éxodo de los gallegos

30 jul 2010 . Actualizado a las 19:39 h.

Con solo 12 años, Alberto Martí Villardefrancos comenzó a trabajar en el mundo de la fotografía: primero revelando negativos en el laboratorio de Foto Blanco, y luego con la cámara a la espalda y capturando con su objetivo lo que se le pusiera a tiro. De esta forma, se convirtió en un testigo de excepción de todo lo que ocurrió en la ciudad durante las últimas siete décadas, en las que también vio como muchos gallegos embarcaban camino de América.

De las más de 200 fotografías sobre la emigración que Martí atesora en su estudio, se han seleccionado 73 para conformar la exposición Os adeuses , una muestra que ayer se inauguró en la Fundación Barrié, y que nació del empeño del fotógrafo y también comisario de la exposición, José Caruncho. «Mis primeros contactos con Alberto Martí fueron con sus exposiciones en la antigua Estación Marítima, en algunas de las cuales había más de 1.000 o 4.000 fotografías. Algunas de ellas eran de la emigración, y allí pensé que si tuviera más, las podríamos reunir en una muestra. Lo llamé y empezamos a organizar el proyecto», recordó. Después de visionar todos los negativos, eligió los 73 mejores, que distribuyó en tres apartados: A ida , A volta y O buque Santa María (que reúne imágenes de este barco, que fue secuestrado en 1961). Caruncho afirmó que Galicia cuenta con grandes fotógrafos de la emigración, y que entre ellos está Martí, «quien supo fotografiar las desdichas humanas con tanta clase. Es una buena persona y un caballero de la cámara».

El legendario fotógrafo agradeció todas estas palabras y confesó que sin el empeño de Caruncho, la Fundación Barrié, el CGAI y el Consello da Cultura Galega no se habría realizado esta exposición. «Estas fotografías yo las iba a hacer para mi periódico, La Voz de Galicia, en el que llevo 70 años trabajando y colaborando, y yo hacía estas fotos para que se publicaran al día siguiente, por el interés periodístico que tenían. Siempre pensé que estas fotos morirían en el baúl de los recuerdos, y nunca me hubiese imaginado que se llegase a hacer una exposición».

Alberto Martí también recordó que antes era muy difícil trabajar de fotógrafo, porque había que ir cargado con la cámara, las placas de cristal, el magnesio, el trípode... «Ahora todo es facilísimo, hacer fotografías ahora está tirado», afirmó el veterano fotoperiodista, quien confesó que «jamás de la vida regateé por hacer una buena fotografía, sin pensar en el peligro que suponía». A sus 88 años de edad, Martí Villardefrancos explicó que seguirá trabajando, «porque es lo único con lo que disfruto. Desde los 12 años no me interesó más que trabajar, y a los domingos les tenía rabia, porque no podía trabajar».