Si todavía quedaba algún resquicio para la duda, Marc Gasol la ha despejado. El catalán dejó patente en su cuarto partido en la NBA que compite entre los grandes monstruos del baloncesto mundial por méritos propios, no por ser el hermano del mejor jugador español de todos los tiempos. En su último encuentro, el pívot logró unos números estratosféricos para un debutante. Firmó 27 puntos y 16 rebotes, 14 de ellos en defensa, en los 35 minutos en que estuvo en cancha. Un registro nunca visto desde que Shaquille O'Neal se estrenó vestido con el uniforme de los Orlando Magic en 1992.
El de Sant Boi impartió una lección magistral de su enorme potencial ante los más de 10.000 hinchas que se congregaron en el FedEx Forum de Memphis para ver el triunfo de los suyos por 90-79 ante Golden State. Hasta la fecha, los Grizzlies cuentan por victorias sus comparecencias como locales. Los mismos aficionados que abuchearon a Pau cuando este anunció su intención de dejar la franquicia vibraron con el recital de Marc, extraordinario sobre todo en defensa. En solo una semana, el ex del Girona se ha metido en el bolsillo a los seguidores de Memphis.
Gasol anotó 9 de 11 tiros de campo y logró un idéntico porcentaje en los lanzamientos libres. No intentó ningún lanzamiento triple. Además de anotar abundantemente y de capturar 16 rebotes, colocó tres tapones, dio una asistencia y recuperó un balón. Como datos negativos, cabe reseñar las cuatro faltas personales cometidas y las seis pérdidas de pelota.
Con su actuación, Mar Gasol eclipsó a todos sus compañeros de equipo. Los 26 puntos y 22 rebotes de Andris Biedrins, el mejor jugador de los Warriors, se quedaron en algo testimonial para su equipo, que ya suma tres derrotas en cuatro partidos disputados. Y ello a pesar de que Stephen Jackson, con 17 puntos, y Corey Maggette, con 13, rayaron a un buen nivel.
Al subcampeón olímpico se le ve cómodo con los Grizzlies, sabedor del papel que le corresponde. Además, ha encontrado en Rudy Gay, autor de 14 puntos, un complemento magnífico. Del funcionamiento de esta sociedad dependen en gran medida las posibilidades de éxito de Memphis en este curso. El escolta logró dos de cuatro triples y dio tres asistencias.
El precoz recital de Gasol no tiene parangón desde el 12 de noviembre de 1992, día en el que Shaquille O'Neal disputó su cuarto partido como profesional. Fue una bestia que aplastó a los Washington Bullets con 31 puntos y 21 rebotes. O'Neal comenzaba a dejar patente que iba a ser el pívot por excelencia de las últimas dos décadas. Olajuwon, otro mito del baloncesto, también sorprendió enseguida en la NBA. En su cuarto encuentro, que data del 8 de noviembre de 1986, firmó 25 puntos y 21 rebotes ante Sacramento. Desde entonces, nadie ha conseguido cifras similares a las firmadas por Marc Gasol en tan pocos partidos como profesional. Ni Pat Ewing, ni Dwight Howard, ni el chino Yao Ming, ni siquiera el mismísimo Kareem Abdul-Jabbar.
«No saben lo bueno que es»
El base reserva Kyle Lwry dijo que partidos como el que había jugado Marc Gasol muestran todo el gran potencial que su compañero tiene como jugador de la NBA. «No creo que muchos sepan todo lo bueno que es, porque en la selección española es un hombre fuerte, pero aquí está demostrando que posee todas las demás cualidades para ser un jugador completo», destacó Lowry.
«Todos nos centramos en el marcaje a jugadores como O. J. Mayo y Rudy Gay, pero el que nos destrozó y nos hizo pagar un alto precio fue Gasol», declaró Biedrins, el mejor jugador de los Warriors tanto en ataque como en defensa. «Jugó realmente muy bien y estoy impresionado», concluyó.