Crónica | Mondoñedo celebra As San Lucas Un almuerzo y el concierto de la noche centraron los actos de la jornada
19 oct 2006 . Actualizado a las 07:00 h.?i la lluvia ni el ajetreo de tantos días de fiesta seguidos asustaron a los 510 mindonienses que ayer acudieron al Festival de la Tercera Edad. Tras recorrer a pie la distancia que separa el pabellón polideportivo de la zona en que aparcan los autobuses, una proeza si se tiene en cuenta que había personas con más de noventa años, el grupo compartió un almuerzo con los representantes de los grupos municipales. Estaban varios miembros del PP, con el alcalde y la edil de Servicios Sociais al frente, Luis Rego y Elena Candia, y los socialistas y nacionalistas, representados a su vez por Modesto Díaz y Xusto Fernández. El menú _empanada, callos, pollo asado y requesón con miel_ fue el que mayoritariamente eligieron los homenajeados. Parece que estaba bueno y lo disfrutaron, al igual que la sobremesa, en la que el recinto se animó con el baile y la conversación. Lo único que no pudo ser, aunque desde el Concello lo intentaron, fue tener al Fary en el pabellón. El artista venía circulando y tenía previsto llegar a Mondoñedo con el tiempo justo para el concierto de la noche en la Plaza de la Catedral. Suponemos que hasta las piedras se animarían con el Torito bravo, y a saber lo que opinaría Cunqueiro, allí desde su banco. En la fiesta, Filomena Cabanas Rei, es casi tan famosa como el cantante. Esta vecina de Zoñan de noventa y cinco años y medio y de aspecto estupendo, pese a que, según ella confesó, «a procesión vai por dentro», acapara desde hace tres años el premio de ser la más mayor de la reunión. Ya le prometió a la concejal de Asuntos Sociais que si llegaba al año próximo, sería ella la que le trajese el regalo. Entre los hombres, Jesús González Bouza, de Figueiras, se llevó el obsequio por ser el de mayor edad. Tiene 92. De tercera, con 91 otoños a la espalda, María Bouso Corral, de Couboeira, que también tuvo su obsequio, por haber entrado en la quinta de los nonagenarios. Fuera, mientras tanto, seguía la fiesta con títeres, exhibición de manejo de ganado y para el final la actuación del Fary y la verbena.