Problemas de gestión de la franja costera aparte, donde existen distintas interpretaciones de las administraciones implicadas (la proliferación de aparcamientos para coches junto a las playas es una), el litoral lucense, con 220 kilómetros, es el único de España donde se completó el deslinde del dominio público marítimo-terrestre, según datos del Ministerio del Ministerio de Medio Ambiente, Medio Rural y Marino. El objetivo es garantizar el uso público, regular la utilización racional de bienes y conseguir un adecuado nivel de calidad de aguas y ribera. Con 10.099 kilómetros de costa, el 24% de la costa española son playas. A diciembre último había deslindados 8.254 kilómetros, estando próximos a completarse los de Granada y Tarragona. En la costa coruñesa el proceso estaba al 89% (872 de 1.089 kilómetros) y en la de Pontevedra, al 84,2% (445 de 599 kilómetros).
No solo el proceso urbanizador afecta al litoral. En San Miguel de Reinante, por ejemplo, la contaminación por abonos agrícolas (purines) en las zonas más al interior, y en el arroyo Barranca donde también hay aguas residuales de algunas viviendas, son otros males. La fuerte compactación de la arena es por construir sobre la duna parque de juegos, miradores, accesos y duchas.
Plantas exóticas
Y también está el problema de las zonas ajardinadas, que aumentan el riesgo de introducción de especies exóticas como la uña de gato, que ocupa una importante franja en Reinante, pero también en Altar-San Cosme, Pampillosa en Fazouro (aquí también crece la perjudicial hierba de la Pampa), Lago (donde está sustituyendo al autóctono barrón), Abrela, Xilloi o Covas. En esta última también crece la Oenethera sp. originaria de Chile y con flores amarillas, o la Arctotheca caléndula, otra invasora con flores amarillas, parecidas a las margaritas.