Las retribuciones a los tres ediles del gobierno bipartito de Viveiro, una exclusiva, la de María Loureiro (PSOE), y dos parciales, las de Bernardo Fraga y Olaia Casas (ambos BNG)le costarán a las arcas del municipio más poblado de la comarca, 44.871 euros anuales. Loureiro percibirá 22.435 euros, y Fraga y Casas 11.217 euros cada uno. El alcalde, Melchor Roel, añadió que los ediles percibirán las mismas cantidades aprobadas en el 2003, de dietas y asistencia a plenos, «no nos hace falta más austeridad», ironizó.
La propuesta contó con el apoyo de PSOE y BNG, el voto en contra del PP y la abstención de IVI. Jaime de Olano, desde las filas populares aludió al contenido del informe del interventor, al no establecer la jornada laboral de las dedicaciones parciales. Roel, recordó que es el jefe de personal, «e non o interventor» quien fija la jornada a desempeñar. Previamente, César Aja había solicitado que los informes de los plenos figuren en la documentación previa.
Fraga será el primer teniente de alcalde, y llevará obras, cultura y turismo; Loureiro, la segunda, con urbanismo, gestión, bienestar social y seguridad ciudadana; Galdo será el tercero, al frente de deporte y comercio; y Cal, el cuarto llevando medio ambiente, educación y mujer. Estas áreas se subdividirán con los ediles Olalla Casas, Covadonga Viamonte y Carlos Gueimunde.