
Bajo el lema «Por un Viveiro aberto ao mar», el BNG convoca una concentración de protesta que se celebrará el próximo día 23 de noviembre a las 12.30 horas. El portavoz municipal, Bernardo Fraga, junto a otros miembros del grupo nacionalista, presentaron ayer la movilización, invitando a los vecinos a participar «na defensa dunha das zonas máis importantes do noso concello», aludiendo al muelle viejo, en un estado «lamentable e en constante deterioro», así como el puerto deportivo, «cunha nefasta xestión por parte de Portos de Galicia».
Seis son las demandas que dan contenido a la concentración. Los nacionalistas piden la demolición de los galpones y la reparación y mejora del muelle viejo; que se retiren las casetas de obra del puerto deportivo y se devuelva el edificio de la Guardia Civil del Mar; que se elimine la valla exterior; que se cumpla la Ley de símbolos y la de Normalización lingüística; el dragado de los accesos al puerto deportivo y «a normalización» de las relaciones entre el Concello de Viveiro y Portos.
Fraga habló de «entorpecemento mutuo» entre el Concello, Portos de Galicia y Costas, situación que «provoca o abandono no que se atopa o peirao vello». Criticó también al gobierno local: «En dez anos de responsabilidad socialista foron moitas as promesas, pero ningunha solución».
El BNG presentará una enmienda a los presupuestos de la Xunta para que se incluya una partida destinada a la mejora integral del muelle viejo.