Valoran tomar medidas más drásticas si se repiten los temporales
05 mar 2014 . Actualizado a las 07:08 h.Las olas tienen en la UVI a toda la costa. En Viveiro, dañaron las dunas de Area y servicios de la playa que quedaban. Inundaron calles en Covas, llegó a la carretera en Celeiro, afectó al mobiliario urbano en Covas donde dañó de nuevo el paseo y cubrió de arena la carretera. En Celeiro tiró una decena de bloques en la parte de arriba del espigón y estaban a la espera de comprobar si afectó por fuera.
Los paseos marítimos y la carretera que bordea el litoral entre Barreiros y Ribadeo se llevaron la peor parte del temporal. El mar volvió a causar desperfectos en paseos antes dañados, como los de Fontela-Valea y Lóngara, donde arrancó pasarelas de madera y destrozó algún acceso de bajada a las playas. Cruzó la carretera en Reinante, dejando la playa convertida en un auténtico pedregal y restos de piedras y madera en el vial costero. En la playa de Arealonga todavía se podía ver ayer un tramo del paseo destrozado y la huella del mar campando a sus anchas por alguna de las fincas de casas unifamiliares.
Otro arenal seriamente dañado fue el de Esteiro (Ribadeo), donde el mar dañó el paseo, rompió una puerta de los baños y derribó parte de la canalización de un arroyo. También tiró parte de los viejos muros de piedra de los terrenos próximos a las cetáreas de Rinlo. En este pueblo ayer se mantenía la prohibición de acceder al puerto. La fuerza del oleaje tiró por tierra parte de las reparaciones iniciadas en el paseo tras los anteriores temporales, se llevó por delante barandillas y derribó una farola del paseo situada a unos tres metros de altura. Ya en Foz, el oleaje causó daños en el merendero de A Pampillosa, se quedó a medio metro de alcanzar las paredes del castro de Fazouro y puso en peligro varias casas de Nois. Tanto este puerto focense como el Paseo de Laredo, en A Rapadoira, y el que comunica la EDAR con el puente de Fazouro, continuaban ayer cerrados al público. El alcalde Javier Jorge Castiñeira arremetió contra los que, en medio de temporales, se acercan a los paseos solo para hacer fotos, y el exregidor, García Rivera, abogó por cortar paseos y las carreteras más próximas al litoral.