Olano, PP, entiende que las sedes actuales, personal y juicios seguirán
10 abr 2014 . Actualizado a las 07:01 h.La alcaldesa de Viveiro, María Loureiro (PSOE), anunció que están «indignados» con el anteproyecto de Ley aprobado el viernes en consejo de Ministros donde se contempla la reestructuración del mapa judicial actual y la desaparición de 41 de los 45 partidos judiciales de Galicia. «Unha vez máis vese a política de recortes, queren quitarnos servizos e facerlle pagar doble aos veciños, primeiro coas tasas e logo obligándoos a desplazarse», manifestó, añadiendo que por su parte se pondrá en contacto con el alcalde de Mondoñedo y se sumarán a cualquier movilización que se impulse contra esta reforma que, a su entender, les va a dejar sin un servicio que lleva aquí muchos años.
La regidora recordó que el alcalde anterior ofreció la cesión de la antigua bliblioteca municipal para facilitar a los juzgados de Viveiro espacio para ubicar la documentación, que no cabe en el edificio actual: «Estamos cos trámites, Nos requeriron unhos planos e xa os enviamos, pero ahora...».
La percepción que tiene del anteproyecto el diputado y concejal del PP de Viveiro, Jaime de Olano, que también es abogado, es completamente distinta. Primero, matiza que se trata de un anteproyecto al que le queda un largo recorrido, durante el cual podrá sufrir transformaciones y «puede variar mucho».
Y en segundo lugar, afirma que «hasta donde yo sé se garantiza que se mantienen las sedes judiciales con oficina y funcionarios y se mantiene la celebración de los juicios». Según de Olano, lo que se está impulsando es una reorganización en la que desaparecen los partidos judiciales, pero no la sedes e insiste en que los jueces, aunque dependan del Juzgado Provincial de Instancia de Lugo, tendrán una unidad desplazada y estarán físicamente en las sedes actuales: «Se mantienen todas las sedes judiciales y eso implica oficina judicial, funcionarios, jueces...», explica de Olano.
Frente a esta opinión, diversos miembros de la Curia de los partidos judiciales de Mondoñedo y Viveiro expresaban esta semana sus rechazo y en el mejor de los casos, sus reservas hacia una reforma que consideran va a conducir a la supresión de servicios y de personal.