«Los bancos, tal y como se conciben ahora, tienden a desaparecer»

edith filgueira FOZ / OURENSE / LA VOZ

A MARIÑA

Alex Carausan

Nacido en Foz y programador informático, dirige el desarrollo de una «startup»

05 abr 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

«Estamos trabajando desde el pasado mes de diciembre en una tarjeta de crédito, para gente joven sobre todo, que permita pagar pero también hacer transferencias, tener planes de ahorro o hacer intercambio con monedas digitales sin cobrar ningún tipo de comisión», cuenta Moncho Pena (Foz, 1972). Este ourensano de adopción -lleva cuatro años residiendo en la ciudad aunque anteriormente también vivió en O Barco- dirige la parte tecnológica de una empresa emergente, que se enfoca a un público de entre los 15 y 25 años.

Pena trabajó anteriormente en una empresa que nació en Ourense y que funciona a modo de hucha electrónica. CoinsCrap guarda los céntimos resultantes de las compras por Internet automatizando el proceso de ahorro. Y es una función similar la que este focense pretende desarrollar para la nueva aplicación en la que trabaja. «La idea es que cuando crezcamos en clientes podamos también proponerles seguros de viaje, descuentos puntuales o planes de ahorro», añade.

Existen ya en el mercado otras empresas similares como Revolut, Monzo o la también española Bnext que ofrecen las prestaciones de un banco pero de forma exclusivamente virtual y sin cobrar comisiones. Basta con descargarse las aplicaciones en el dispositivo móvil y abrirse una cuenta para empezar a realizar operaciones por Internet y de un modo seguro. Aunque es precisamente la sencillez en su empleabilidad la que acarrea alguna pega. «Una de las mayores complicaciones a la hora de poner en funcionamiento estas empresas es conseguir un control sobre las operaciones que puedan realizar los menores de edad que se den de alta. En esos casos tendrán que ser los padres los que den su consentimiento», aclara Pena.

«Los bancos, tal y como se conciben ahora, creo que tienden a desaparecer porque con este método lo único que hay que hacer es cambiar de aplicación. Si no se está contento con el trato o las funciones disponibles basta con descargarse otra App y cambiarse de empresa», sopesa este programador informático con amplia trayectoria en el sector.

Para los más reticentes a realizar operaciones económicas a través de Internet es importante destacar que cada vez que se entre en la aplicación se les requerirá un código de acceso, exactamente igual al procedimiento actual que exigen las aplicaciones de las entidades bancarias en la actualidad.

Estos métodos de pago tienen otro punto a su favor y es que todas las operaciones quedan agendadas. «Si todo se pagara con tarjeta el dinero negro, en un principio desaparecería. Aunque no hay que perder de vista las criptomonedas que se pueden emplear abriendo cuentas anónimas. Lo que pasa es que todos los movimientos quedan registrados», señala.

Para coordinar el proyecto, que está a punto de ver la luz, viaja una vez por semana a Madrid y el resto del tiempo trabaja desde su domicilio. «En las grandes ciudades como la capital o Barcelona, sí que hay un gran movimiento de startups pero no es tan grande todavía como en Londres o París. Aunque EEUU va en cabeza, pero tiene la dificultad del horario. Cuando tú estás trabajando, ellos están durmiendo», finaliza entre risas.