
La alcaldesa emplaza al Gobierno gallego a analizar por qué los Concellos no pueden cubrir ese servicio
28 jul 2018 . Actualizado a las 05:00 h.Covas, la playa urbana y la más concurrida de Viveiro, se ha quedado sin socorristas. «Por causa de fuerza mayor», tras renunciar uno de los contratados y estar de baja otro, según la alcaldesa María Loureiro. Lamenta «no encontrar socorristas» para prestar un servicio que el portavoz del PP Antonio Bouza considera «tan necesario e tan demandado polos usuario» de un arenal que, admite, «non resulta especialmente perigoso para o baño».
La Xunta concedió al Concello subvenciones para contratar siete socorristas durante dos meses en verano. Se presentaron nueve aspirantes, siete fueron seleccionados y dos pasaron a lista de espera. De los elegidos continúan cinco. Trabajan todos los días en turnos, con un mínimo de dos, y con las libranzas que les corresponden. Insuficientes para atender dos playas, el Concello ha optado por destinarlos a Area, galardonada con bandera azul y menos guarecida que Covas. «No podemos pedirles más, porque ya hacen más de lo que les corresponde y la Ley impide que vigile las playas uno solo».
El popular Bouza emplaza a la alcaldesa a «restituir á maior brevidade posible» los socorristas en Covas. La socialista Loureiro reconoce el «gran problema que tenemos todos los Concellos porque no hay socorristas y, a los que hay los contratos de dos meses que subvenciona la Xunta no les interesan». Por los plazos que marca la legislación para seleccionar nuevos socorristas, la alcaldesa deja entrever que Covas recuperaría el salvamento si se reincorpora el socorrista que está de baja.
«Recursos sanitarios escasos»
Loureiro añade: «En lugar de criticar al Concello, el PP debería plantearle a la Xunta que debe sentarse con los Concellos y analizar cómo resolver un tema de base, el de que no hay socorristas. Urge atajarlo, pero no depende de los gobiernos municipales, sino del gallego».
La alcaldesa compara las «críticas del PP» con el servicio de salvamento en las playas con su «silencio ante otro problema serio que también afecta a toda A Mariña. Los recursos sanitarios son muy escasos para el verano y, justo cuando la comarca duplica la población, seguimos con solo una ambulancia medicalizada».