Miguel Lago, humorista: «Van a cumplirse 20 años de mi primer monólogo, con 18 años»

Recién salido de la ducha, Miguel Lago coge la llamada, con motivo de su cercana actuación en Viveiro. Este domingo 1, sin ir más lejos, le tendremos con su humor «gamberro» en la ciudad del Landro, a las 19.00 en el Pastor Díaz, con el «Especial Navidad. Mejores monólogos». Repite presencia en A Mariña quien también forma parte del equipo televisivo del programa «Todo es mentira», entre otros trabajos en medios.

-Siendo vigués de cuna, ¿ha podido acercarse a ver la gran iluminación navideña de Vigo?

-Sí. Hicimos un reportaje para mi programa con el alcalde y como duran tanto tanto... aún volveré.

-¿Recuerda el primer monólogo que hizo en su vida?

-Claro! Primero, yo tenía 18 años. Y fue directamente para «El Club de la Comedia». Van a cumplirse 20 años de eso. Fíjate si ha llovido!

-Viene al norte gallego. ¿Nota diferencias con el sur sobre cómo sentimos el humor... o no?

-Ya tendríamos que llevarlo a nivel peninsular porque en Galicia no he sentido ninguna diferencia destacable entre norte y sur, este y oeste.

-Cuando actúa en su tierra...

-Me gusta mucho. Además, es el público más fiel. Siempre es una alegría, sobre todo el entorno. Cada vez que voy actuar en Galicia me permite estar en Galicia, comer en Galicia, ver a la gente... Nunca hay un «no» para ir.

-Ahora vuelve por Navidad.

-Nunca mejor dicho.

-¿Cómo es la cita en Viveiro?

-Voy a darle una vuelta a todo el material nuevo que estoy preparando para el nuevo show. Voy a presentar cosas muy novedosas de cara al estreno en Madrid el 11 de enero, «Todo al negro», de una manera un tanto primitiva pero que van a ver en Viveiro. En el vamos más a tope.

-Cuidado con el Código Penal, del que dijo una vez que era donde estaba el límite a la hora de hacer humor. ¿Alguna vez le han denunciado?

-Que va! Siempre hay mucho ruido y mucha amenaza pero a la hora de la verdad, nunca pasa nada y eso a mí me tiene muy tranquilo. Y del mismo modo, tampoco nos flipemos los humoristas.

-¿No practica la autocensura?

-Nunca me ha hecho falta. Para mí la única censura que me impongo es si tiene gracia o no la tiene, no hay más.

-¿Es distinta la repercusión si hablamos de la televisión?

-La televisión me ha aportado todo en lo bueno y nada en lo malo. Me lo estoy pasando muy bien en ella, donde hago lo que quiero.

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