Los trabajadores de Vestas pelearán hasta el final por evitar el cierre

A MARIÑA

Trabajadores de Vestas, en el lugar de la reunión
Trabajadores de Vestas, en el lugar de la reunión XAIME RAMALLAL

La empresa rechazó estirar las consultas, como pedían comité y Administraciones, y se redacta el acta de desacuerdo

08 nov 2021 . Actualizado a las 23:53 h.

Comité y Vestas redactaban al cierre de esta edición una acta de desacuerdo en el último día del período de consultas del ERE extintivo que la multinacional danesa pretende aplicar en la factoría de Chavín. A las 23.30 horas, los sindicatos y la compañía no habían llegado un pacto para una alternativa al cierre de la fábrica, que supondría un total de 115 despidos.

La última reunión del período de consultas fue maratoniana. Comenzó a las cuatro de la tarde en el Thalasso Las Sirenas, donde decenas de trabajadores de Vestas se reunieron, vestidos con ropa de trabajo, para mostrar su apoyo a sus compañeros del comité.

Los trabajadores intentaron que la multinacional accediese a estirar el período de consultas al menos hasta final de año, tal y como también habían pedido las Administraciones -Xunta de Galicia y Ministerio de Industria-, toda vez que el Ejecutivo autonómico identificó ocho empresas viables para hacerse con la factoría, de así estimarlo oportuno, y dado que una novena empresa ajena a este proceso de selección comunicó a la propia Consellería de Emprego su interés en una venta.

De hecho, la conselleira de Emprego, María Jesús Lorenzana, expuso que la Autoridad Laboral realizó «tres requerimentos» a Vestas para que negociase. «Estamos a observar unha negociación nefasta», indicó la representante del Gobierno gallego, que pidió a la firma «máis tempo» para una posible venta.

Sobre esa posibilidad se movieron las conversaciones. Vestas no realizó ninguna propuesta nueva en la jornada final. Hasta ayer, la oferta de plan social de Vestas pasaba por mantener los empleos hasta final de año, cuando cesaría la producción y convertiría la fábrica en un centro de servicios y formación, con la posibilidad de que 24 operarios se quedasen a partir de entonces en Viveiro. Además, prometía la recolocación de los restantes trabajadores en otros emplazamientos de la multinacional.

Una propuesta que no satisfacía al comité, que reclamaba la posibilidad de una salida industrial al cierre, y matizaba que la producción que Vestas prometía mantener hasta el 31 de diciembre «xa está en marcha, co material en Viveiro para facela».

El comité criticó que la empresa «non presentou novidades»«non se plantexou en absoluto ampliar o ERE como recomendou activamente a mesa industrial». Así, «quedamos á espera de saber como actuarán as Administracións logo de ver a mala fe coa que executou Vestas este proceso», concretó el presidente del comité, David Mariño.

Vestas comunicó el ERE extintivo el pasado 20 de septiembre. Los 115 trabajadores de la factoría de Chavín fabrican generadores para la plataforma terrestre de 2 MW, así como paneles de control de la turbina marina V164 para mercados situados fuera de España. El despido colectivo sorprendió en Viveiro, toda vez que la multinacional danesa celebró en 2019 con una fiesta sus dos décadas en el municipio, hablando entonces de «grandes planes de futuro», y dado que la factoría no da pérdidas, según reconoció la propia directiva.