La Xunta culpa a Vestas de la retirada de firmas interesadas en la planta y da por hecho el cierre

A MARIÑA

La conselleira de Emprego, María Jesús Lorenzana
La conselleira de Emprego, María Jesús Lorenzana XOAN A. SOLER

El comité reclamó sin éxito al Gobierno gallego que obligue a la multinacional a vender, y el lunes abordará la hoja de ruta en una asamblea

18 dic 2021 . Actualizado a las 16:41 h.

La Xunta de Galicia confirmó ayer al comité de Vestas que no hay empresas interesadas en la planta tras la retirada de los tres fondos de inversión que barajaban comprar la fábrica de Viveiro, una situación de la que responsabilizó a la multinacional. «Non está interesada en vender, non quere que ningún outro competidor adquira a factoría e leve a cabo un proceso de reindustrialización para así manter o emprego», aseguró la conselleira de Emprego, María Jesús Lorenzana.

Tras una reunión con los sindicatos en Santiago de Compostela, sin la compañía, Lorenzana afirmó que «os investidores interesados na propiedade da planta veñen de renunciar ao seu propósito ante os atrancos impostos pola multinacional». Vestas, abundó, «continúa co seu plan de pechar a fábrica de Viveiro o 31 de decembro e, coa súa actitude, está a imposibilitar calquera posibilidade de venda da factoría, a única saída para manter a planta activa e preservar os postos de traballo».

La Xunta aseguró que «imos continuar traballando na busca doutros compradores», aunque alega no tener fuerza para forzar un traspaso. El comité indica que pidió ayer al Gobierno autonómico que «xerase un cambio na dinámica» de Vestas «ofrecendo investimentos ou créditos, así como presionando nas xestións de parques eólicos onde a multinacional opere ou sexa socio», pero la respuesta del Ejecutivo autonómico a los trabajadores fue que «a propietaria declina esta posibilidade, e o libre mercado da Unión Europea non contempla ningún marco legal para obrigar a Vestas en ningún sentido».

Fuentes cercanas a la negociación admitieron a La Voz que la oferta de los fondos pasaba «por comprar la fábrica activa, para posteriormente vendérsela a un tercero, y nos consta que hay empresas interesadas en implantarse en Europa». No se trata, en todo caso, de firmas del sector eólico. Las mismas fuentes lamentan la actitud de Vestas, que «dio unos plazos inviables y tuvo una posición inamovible que imposibilitó siquiera preacuerdos», y aseguran que será «difícil» vender la fábrica cerrada.

El comité se reunirá el lunes, a primera hora, para abordar la hoja de ruta a seguir, y a las 10.30 horas habrá asamblea de personal.