Así está una semana después el socavón que dejó al desnudo la desconexión de A Mariña

José Francisco Alonso Quelle
josé alonso BURELA / LA VOZ

A MARIÑA

Xaime Ramallal

Ocho mil vehículos se ven obligados a circular cada día por el tramo en obras, con un carril y regulado por semáforos

27 ene 2023 . Actualizado a las 18:08 h.

Esta tarde se cumplirá una semana de la aparición de la grieta en la N-642 a la altura del acceso a Burela desde Foz que, al poco, llevaría al Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana (Mitma) a cortar el tráfico de forma preventiva y por seguridad. Eran las once de la noche del pasado viernes cuando un socavón de varios metros de profundidad, producido por una bolsa de agua, desnudaba todas las carencias en infraestructuras de A Mariña, que quedaba rota en dos, con el tráfico desviado por Ferreira y Viveiro, lo que obligaba a los conductores (miles cada día) a dar un rodeo en el que se tardaba no menos de 80 minutos.

El socavón generó un clamor en la ciudadanía, harta de dos décadas de anuncios y promesas incumplidas de los partidos con responsabilidad de gobierno, a nivel autonómico y estatal, responsables de la ejecución de la autovía A-74, entre Barreiros y San Cibrao, de la que no se ha movido ni un metro cuadrado de tierra, y del corredor San Cibrao-Ferrol, del que se han ejecutado 16 de los 80 kilómetros previstos (en A Mariña solo el tramo Celeiro-San Cibrao, abierto en el 2017).

Xaime Ramallal

Con las brigadas del Mitma trabajando contrarreloj -se emplearon hasta 16 bombas de agua, también con ayuda de la Xunta- en 48 horas se logró abrir a la circulación un carril, donde el tráfico se regula con semáforos. Es la situación que soportan los más de 8.000 conductores que diariamente pasan por el tramo. Si se toma como referencia el último dato publicado por Tráfico, correspondiente al año 2021, en el punto de control de la N-642 en el kilómetro 36,10 (en la recta de Cangas), en enero del 2021 pasaron una media de 6.855 vehículos al día, 481 de ellos pesados. Fue en plena pandemia. Si la referencia es el último año con estadísticas publicadas antes del covid, enero del 2018, la cifra se incrementa hasta los 8.856 vehículos totales al día (682 de ellos pesados). En agosto el número sube hasta 12.224 automóviles. 

Paciencia y resignación

Las personas que tienen que pasar por sus vehículos por el tramo regulado por semáforos lo asumen con paciencia y como un mal menor, frente a la alternativa de desviarse por Viveiro. Además, en las horas punta los agentes de Tráfico acuden a regular la circulación, lo que la agiliza mucho.

Xaime Ramallal

Frente al clamor social por el retraso en las infraestructuras básicas de A Mariña, los partidos políticos reaccionaron con iniciativas, reproches, preguntas en el Congreso y el Senado pidiendo explicaciones y plazos, que se potencie el tren o un plan de inversiones por el que A Mariña sigue esperando. Lo cierto es que en los presupuestos de la Xunta del 2023 figuran 8 millones para la vía de alta capacidad Ferrol-San Cibrao y en los del Gobierno estatal dos millones de euros para la A-74, para continuar con los estudios y proyectos previos a su construcción. Para hacerse una idea de lo insignificante de la previsión de gasto basta decir que el solo el tramo Barreiros-Foz se estima que costará 241 millones de euros.

Lo que hay ahora son brigadas de obras trabajando para reparar el socavón en la N-642 en Burela, a la que se tendrán que resignar a seguir circulando durante muchos años, sin ninguna otra alternativa, los mariñanos. Y sobre el trabajo del Mitma, el delegado del Gobierno en Galicia, José Manuel Miñones, manifestó ayer: «Nesta semana van rematar os traballos para o drenaxe para coñecer as causas. Estanse facendo traballos de inspección con cámaras de toda a canalización do drenaxe. Nós centrámonos principalmente na maneira de, no menor tempo posible, poder garantir a circulación a través da estrada. Creo que se fixo nun tempo récord, sendo ademais en fin de semana, para que a principios de semana estivese a xente circulando coas mínimas retencións, como así foi».

El delegado del Gobierno dice que el dinero no es problema para atender las emergencias

José Manuel Miñones, en relación con las obras que se ejecutan en la N-642 en Burela, quiso dejar claro que desde el Gobierno central no hay un problema presupuestario para atender las emergencias en carretera provocadas por los temporales.

Xaime Ramalla

«A situación nestes días atrás foi moi complicada, non solo nas estradas de competencia nacional. Nos constan moitas incidencias e cortes nas estradas, tamén nas da Xunta, nas das deputacións e concellos. E ante iso, o importante é a seguridade e despois poñer en disposición esas estradas para que a circulación non se vexa afectada», apuntó. Y sobre el socavón en la N-642 en particular, añadió: «Nun primeiro momento o que fixemos, ademais de achegarse alí a subdelegada do Goberno para coordinar os traballos, foi habilitar un paso para as emerxencias. Xa se fixo na mesma primeira noite. E a partir de aí, comezaron os traballos de reposición, onde temos os orzamentos. As partidas para a conservación das estradas veñen aumentando ano tras ano, en Lugo no 50 % con respecto ao ano pasado, e hai dous anos xa se aumentara un 12 %. Non hai un problema orzamentario. Hai que actuar nas necesidades que hai». 

Como las cataratas del Iguazú

La cantidad de agua que se acumuló en la bolsa que a la postre provocó el socavón en la carretera fue enorme. Las bombas de achique estuvieron trabajando de forma incesante unos tres días, llegando a picos de verter al mar 8.000 litros por minuto: «Aquilo parecían as cataratas do Iguazú», manifestó gráficamente el alcalde de Burela, Alfredo Llano.