Es su momento dulce en la comarca, buscando equilibrar cuerpo y mente
26 jun 2023 . Actualizado a las 13:18 h.Hace varias décadas, los profesores de yoga en la comarca de A Mariña se contaban con los dedos de media mano, prácticamente. Los primeros que comenzaron a enseñar en la comarca esta práctica milenaria que la India ha regalado al mundo, como una especie de reseteo de cuerpo y mente, en aras del equilibrio total, iniciaron un camino que luego siguieron otros docentes, expandiendo una disciplina que literalmente significa «unión de cuerpo y la mente». Goza de cierto sentido espiritual, pero no como tradicionalmente se interpretaría en Occidente, y se gana a la gente por los beneficios que aporta una práctica continuada y constante en el tiempo. Hoy en día hasta nos podemos perder en el universo de modalidades que se ofertan, dando prioridad siempre a aquellas que conectan con las fuentes originales y a la profesionalidad y formación del que enseña. La realidad es que hay ya mucho donde poder elegir. A la comarca fueron llegado formas múltiples de expandir el yoga, desde las clásicas como el hatha yoga, el ashtanga, el yoga tibetano o el yoga nidra que tiene su origen en técnicas tántricas, hasta otras «de última generación» como yoga aéreo, el llamado «yoga de la risa» vinculado a la risoterapia, prenatal...
Conmemoración
El pasado 21 de junio fue el Día Internacional del Yoga, promulgado en 2014 por ONU. El yoga es realmente una disciplina tradicional espiritual, física y mental. Se cree que tiene 35 siglos de antigüedad, originaria de la zona del Indo.
Carolina Geneiro, profesora de Ashtanga: «Progresivamente se va aprendiendo a construir una práctica personal»
Desde O Sol Yoga y Pilates en Foz, Carolina Geneiro imparte ashtanga. «Es un método _explica_ en el que aprendemos progresivamente a construir una práctica personal. La manera de enseñarlo y aprenderlo apunta a que el estudiante sea el protagonista de su práctica personal. No se hace la práctica del profesor/a, sino que cada persona construye su práctica de acuerdo con sus posibilidades. Te hace libre». Eso fue lo que le atrajo, confiesa: «La posibilidad de hacerlo sola cuando no iba al shala [lugar donde se practica]». «Cuando se enseña correctamente, ayuda a superar limitaciones mentales y físicas», finaliza Carolina Geneiro.
Nuria Torrado, profesora de Yoga Integral: «Hace 30 años, hacer yoga en A Mariña era algo extrañísimo y raro; ahora no»
Nuria Torrado comenzó a impartir yoga en A Mariña en la década de los 90, en un momento muy incipiente de la práctica de la disciplina en el que ella estaba «de paso» y se hizo cargo de un grupo al marchar una pareja de docentes de yoga a Lugo: «Éramos dos o tres en la comarca». «De aquella, hacer yoga aquí era algo extrañísimo y raro. Había mucha gente que pensaba que era una secta», rememora sonriendo. Pero ahora no. Todo lo contrario, se ha implantado y expandido. Sus clases toman parte de la rama del hatha yoga, «que son asanas, pranayama y relajación, pero si haces meditación y otro tipo de trabajos dentro de la clase, como yoga en parejas o meditaciones grupales, es un yoga integral», explica. Su trayectoria comenzó por un yoga clásico (perteneciente a la conocida Escuela Sivananda) pero ahora «mi forma de vivir el yoga es diferente» y la ha ido adaptando al alumnado, remarca. «La Escuela Sivananda me sirvió de mucho, me enraizó, pero realmente mi forma de vivir y sentir el yoga es diferente», subraya en su evolución como profesora durante varias décadas en A Mariña, siendo una de las más veteranas en la comarca, indudablemente. «Sigo formándome con Danilo Hernández, que escribió Las claves del yoga y ahora Consciencia desnuda», añade Nuria Torrado, quien reconoce la gran variedad que existe en la actualidad de modos de practicar yoga. También en meditación, en auge: «Hay muchos tipos. Es un concepto que está mal expresado, porque es un estado. Son técnicas de meditación y hay muchas para llegar a el. Yo las recopilo y trabajo en función de las personas que tengo delante, del grupo, adapto la clase».
Hugo Eiroá, profesora de Yoga Tibetano: «Este é un ioga amigable, que todo o mundo pode practicar»
Hugo Eiroá imparte yoga tibetano en Om Centro Integral (Viveiro) y Centro M (Burela). Explica que «coma todos os iogas, empeza a traballar co corpo para poder chegar á mente, e limpala dos velenos que son: ignorancia, ira, aversión, apego. Bebe dos principios e influencias da medicina tradicional tibetana. É un ioga amigable para o corpo que todo o mundo pode practicar, tendo en conta a base da compasión. Ao final da clase maniféstase moito, coa dedicatoria de méritos, que é o que buscamos no ioga, en definitiva liberarnos do sufrimento nós e aos demais». Se ha formado con Javier Akerman y en sonoterapia (da talleres) con Jacomina Kistemaker.
Manuela Saiz, profesora de «Yoga de la Risa»: «En todos los ejercicios se acaba realmente riendo»
Manuela Saiz expande el llamado «yoga de la risa» desde su establecimiento en Foz, Os Tres Teixos, en el que programa retiros de bienestar. «La risa _explica_ tiene un beneficio físico sobre el cuerpo que produce endorfinas. En el yoga de la risa no necesitas tener buen humor porque trabajamos una risa ejercitada. En todos los ejercicios se acaba realmente riendo y es contagioso». Indica que «este sistema lo inventó un médico hindú, Madan Kataria». Se combina con pranayama (técnicas de respiración).
Lucía Erice, profesora de Yoga Prenatal: «Se adaptan posturas del hatha yoga al embarazo»
Lucía Erice imparte yoga prenatal en O Carboeiro (Ribadeo). «Se adaptan posturas _explica_ al embarazo. Da a la futura mamá el tiempo y el espacio para cuidarse y conectar con su bebé. Con el foco en la respiración y el movimiento se pueden aliviar posibles molestias e influir en el sistema nervioso». Ayuda a trabajar «en casa y en el momento del parto» y a ganar en «fuerza y flexibilidad física y mental, confianza...», subraya, además de compartir «la magia de escucharnos y darnos lo que necesitamos».