
Este verano fue y es noticia repetida la «turismofobia», debido probablemente a la masificación en muchos lugares de España y de otros muchos países. Quizá la palabra de este verano no fue otra que« fodechinchos», aquí en Galicia. Desafortunada, ciertamente. Porque vivimos del turismo y nosotros mismos también viajamos y puede que molestemos a veces del mismo modo. Pero el caso es que aquí en A Mariña ya aparecieron incluso carteles por todo San Cibrao en julio de 2022 con el decálogo de los turistas pesados, pelmas, que ya llamaban «fodechinchos». Curioso. Con el sello además -falso, claro- del Concello de Cervo.
Los carteles caricaturizaban -con cierto humor, como esas viñetas satíricas- a esos turistas pesados y criticones que se molestan por todo. Con un tono abiertamente sarcástico y humorístico, el cartel describía el estereotipo de un turista «chegado dende a capital», que «se queixa porque disque falamos cantando e non se nos entende» y protestan «polo cheiro das algas cando veñen á costa». «Falan castellanito e tíranse ás tapas dos bares coma un tonto a un pau».
«Moléstalles que os cans ladren, que os galos canten ou que as gaivotas ataquen e caguen sobre todo o pobo, tamén sobre os seus coches». Fíjense, pasaba en julio del 2022 y fue noticia ahora en toda España dos veranos después. Naturalmente los carteles fueron retirados por el concello de los lugares públicos. A Mariña está de moda, más que nunca, y el turismo es un motor económico cada vez más importante.