Alcoa promete 100 millones adicionales de inversión ante el comité, que se ciñe al acuerdo firmado

A MARIÑA

Los trabajadores de Alcoa, en una concentración el pasado 30 de octubre
Los trabajadores de Alcoa, en una concentración el pasado 30 de octubre Pepa Losada

Los sindicatos cuestionan la «especie de plan o propuesta» de Ignis EQT y la multinacional, que incluye arrancar el 75 % de las cubas en 2025 pero posponer el horno de cocción y el restablecimiento del fondo de garantía al 2028

06 nov 2024 . Actualizado a las 20:56 h.

El comité de empresa y Alcoa se reunieron este miércoles en San Cibrao, con la participación telemática del CEO de Ignis Equity Holdings, Antonio Sieira, para exponer el principio de acuerdo de inversión entre la multinacional del aluminio y la energética. Los sindicatos recelan de «la especie de plan o propuesta esbozado en una diapositiva» y por el que la titular del complejo industrial «viene a decir que intentará llegar a tener algo a final del 2028, y hacer lo que ha comprometido hoy (por ayer)». Así, las centrales ciñen a las condiciones del acuerdo firmado, por el que se pararon las cubas a cambio de realizar mejoras, mantener los empleos y arrancar de nuevo la electrolisis al cien por cien.

«Si la empresa se busca un socio, es una cuestión suya», afirmó el presidente del comité, José Antonio Zan, que recordó que hay un contrato firmado entre Alcoa y los trabajadores que «dura hasta el 2028, incluye la construcción de un horno de cocción de ánodos y que tiene una seguridad sobre los empleos».

Los sindicatos aseguran que la compañía «no ha ampliado la información» sobre el principio de acuerdo con Ignis EQT «dada en las reuniones mantenidas en planta con los trabajadores». Como condiciones para que sea efectivo reclama a las Administraciones maximizar las ayudas del CO2 indirecto y hacerlas estables en el tiempo, además de agilizar los permisos de los parques eólicos vinculados a la planta y los trámites para ampliar la balsa de lodos. A los sindicatos les exige poder acceder al dinero restringido para las inversiones y que sean «flexibles» en los tiempos de los compromisos de las reformas. En lo relativo al horno de cocción de ánodos, la mejora más importante y cara de las comprometidas, Alcoa quiere posponer el proyecto al 2028.

A cambio, de acuerdo, con el comité, Alcoa propone aportar cien millones de euros de flujo de caja de forma inmediata, 75 a su cargo y los restantes 25 con fondos de Ignis EQT, y con una aportación adicional de hasta 100 millones; la continuidad de la producción en la planta de alúmina; el arranque de un mínimo del 75 % de las cubas en el 2025, y no ya el 100 % a finales de ese curso, como se fijaba en el acuerdo entre patronal y personal; restablecer el fondo de garantía reservado para las inversiones «a partir del 2028, siempre y cuando se den las condiciones previstas»; y corregir la situación de empresa en crisis, que le impide acceder a las ayudas que solicita al Estado. La compañía apunta también que ha aprobado los fondos y el proyecto para ampliar la balsa de lodos.

El comité se mostró crítico con la buena acogida que tuvo el anuncio de Alcoa entre las Administraciones. «Es increíble que digan que les parece muy bien todo esto cuando (lo que les exige la empresa) son cuestiones que llevamos reclamando y que tenían que aprobar: desconocemos si es que hasta ahora no lo han hecho porque les ha dado la gana de hacerlo», juzga Zan, que insiste en reclamar una reunión interna con Gobierno y Xunta: «No entendemos como pueden llegar a semiacuerdos con la compañía sin hablar con nosotros», concluye.

Los sindicatos solicitan de nuevo que se convoque la reunión del seguimiento con la empresa y las Administraciones, ya que la última fue el 12 de junio cuando la periodicidad está fijada en un plazo máximo de tres meses. «Están incumpliendo el acuerdo, ya en el trimestre pasado y en el actual, y no han contestado», subraya el comité.

Alcoa ha fijado como plazo hasta final de año para que se den los condicionantes que pide y que se haga efectivo el acuerdo. De no ser así, avanza «decisiones difíciles», en palabras del CEO, Bill Oplinger.

Tras la reunión, Alcoa señaló que el principio de acuerdo con Ignis «permitiría superar las dificultades financieras inmediatas a la vez que se rearranca la producción de aluminio primario».

Además, fuentes de la multinacional precisaron que las dos partes «han confirmado sus compromisos de aportar 100 millones de euros para las operaciones en el momento de formalizar la asociación, con hasta 100 millones de euros de fondos con posterioridad, según la necesidad de las operaciones. Esos compromisos están sujetos a recibir el apoyo de los gobiernos autonómico y nacional, así como de los empleados», subrayaron.

«La compañía ha compartido también con la representación de los trabajadores la disposición de los gobiernos para responder, entre otras, a cuestiones como la aprobación del recrecido del Depósito de Barros Rojos (DBR) o asuntos relacionados con el marco energético, dos cuestiones críticas para el éxito de la asociación», finaliza Alcoa.