La iglesia de Burela, la más internacional, con fieles y catequistas de varios países

La multiculturalidad de Burela se refleja en su iglesia parroquial, la más internacional. No hay más que entrar en el templo para descubrir que, junto a la Virgen del Carmen, San Juan Bautista o María Magdalena, la comunidad caboverdiana también venera a Nosa Señora dos Navegantes y a San Pedro, y la peruana tiene su propia hermandad, la del Señor de los Milagros. La Semana Santa es un buen momento para apreciar la integración. Lo mismo ocurre en la instrucción diaria de la doctrina cristiana. Hay catequistas naturales de Burela, pero también de otros países, como Cabo Verde o Perú.

En el templo conviven imágenes veneradas por unos y otros. La Virgen del Carmen, San Antonio, San Cristóbal, San Juan Bautista, Nosa Señora dos Remedios, la Virgen de la Esperanza, San Andrés, etcétera... También están las imágenes de Santiago, San Pablo y María Magdalena, que sacan en procesión los niños en Semana Santa, una cita religiosa que ahora aspira a lograr la declaración de Festa de Interese Turístico.

"El estandarte del Señor de los Milagros sale en las procesiones de la Semana Santa"

En la entrada del templo burelense, a mano izquierda, observamos un cuadro que reproduce un bajo relieve del Señor de los Milagros. El original se exhibe en Lima (Perú). La comunidad peruana forma parte de esta iglesia, donde también se aloja el estandarte de la Hermandad del Señor de los Milagros «que sale en las distintas procesiones de la Semana Santa». «La festividad del Señor de los Milagros se celebra en nuestro país de origen los días 18 y 28 de octubre, pero aquí la hacemos el 18. Este año lo haremos el 21 de octubre, al coincidir domingo. Hasta aquí también se desplaza gente desde Lugo, de A Coruña y de otros puntos», asegura Hermelinda Vargas, presidenta de la Asociación de peruanos 28 de julio de Burela. Ella, que también es catequista desde el 2016 en Burela, está satisfecha con la experiencia. Explica que, además de los actos en la parroquia, la comunidad peruana, por medio de la hermandad, celebra cada mes, el día 18, un rosario. Se van rotando por las casas y llevan un cuatro que es una reproducción del Señor de los Milagros: «La de Burela es la iglesia de todos. En nuestro grupo, además de peruanos, también tenemos gente de Bolivia, de Colombia...». Unos 300 peruanos viven en Burela.

"Desde siempre pedí ir a misiones y ahora, en Burela, resulta que la misión ha venido a mi"

Jesús Álvarez, el párroco de Burela y también de Cervo, disfruta rodeado de fieles implicados. Cuando le visitamos, después de la misa de las siete de la tarde, nos encontramos con un grupo de colaboradores volcados en la limpieza de la iglesia parroquial. Hombres y mujeres, todos a una. «Desde siempre pedí ir a misiones y ahora, en Burela, resulta que la misión ha venido a mi». Es un firme defensor de la multiculturalidad: «Nos enriquece a todos. Creo que es una oportunidad de ver la vida y el mundo desde puntos de vista diferentes, no solo desde Europa». El párroco aboga por «generar espacios de convivencia libre. Nuestra iglesia es internacional y eso nos permite crecer. El hecho que contar con catequistas de diferentes países nos enriquece mucho y favorece esa integración social tan necesaria». Destaca que en Burela se vive de forma intensa y muy participativa la fe. «Los vecinos de Burela, los de toda la vida, son muy participativos. Les propones participar en cualquier iniciativa y son muy receptivos, muy colaboradores». Jesús Álvarez es también delegado diocesano de Emigrantes y Refugiados. Orgulloso de ser el párroco de una comunidad multicultural, participó durante trece años en cursos en Guatemala y continúa organizando peregrinaciones. La próxima será a Roma, acompañada de un grupo reducido de fieles. Será en breve. «El Papa Francisco está muy implicado con la integración. Tenemos que estar muy pendientes y muy implicados. Nosotros celebramos hace unos meses un encuentro diocesano para fortalecer los vínculos entre las personas emigrantes y las comunidades parroquiales, y salimos muy satisfechos», manifestó el párroco.

Ineida Moreno López, catequista en dos continentes. Ineida lleva dos años ejerciendo como catequista de comunión en Burela, pero antes lo hizo en su país de origen, Cabo Verde. La comunidad caboverdiana es devota de Nosa Señora dos Navegantes (en la imagen), Nosa Señora da Graça y de San Pedro, del que existe también una pequeña imagen en el templo burelense (en sus manos). La celebración de la fiesta en honor a Nosa Señora dos Navegantes reúne cada año en Burela a ciudadanos caboverdianos asentados en diferentes puntos de España y también alguno de Francia. fotos pepa losada

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