Nueve recursos contra el archivo de las grabaciones en webs porno durante una fiesta en Cervo
BURELA
Ocho mujeres los presentan a título individual y la asociación Mujeres en Igualdad de Burela reclama la intervención de la Valedora do Pobo
07 abr 2021 . Actualizado a las 05:00 h.El caso de las denuncias presentadas por las imágenes colgadas en webs porno de más de ochenta mujeres que fueron grabadas sin su consentimiento orinando en un callejón de San Cibrao (Cervo) durante la fiesta de la Maruxaina de 2019 sigue su curso tras el archivo provisional de la causa por un juzgado de Viveiro. Ya han sido presentados nueve recursos, uno por la asociación Mujeres en Igualdad de Burela (Bumei), que ejerce de acusación popular, y otros ocho de mujeres a título individual. Pero habrá más, ya que un despacho de abogados que representa a varias de las víctimas también confirmó su intención de recurrir.
Tras la manifestación del domingo en San Cibrao, en la que participaron centenares de personas para apoyar las mujeres grabadas, Paloma Maseda, portavoz del grupo de víctimas que organizó el acto, ya avanzaba que se sentían con fuerzas para seguir reclamando la reapertura del caso, que además llegará al Parlamento de Galicia. La asociación Mujeres en Igualdad de Burela (Bumei) ha conseguido reunir las 500 firmas que necesitaban para avalar su escrito. Su presidenta Mary Fraga, explicó ayer que estaban cotejándolas y, ante la posibilidad de que algunas se repitan (las recogieron físicamente y virtualmente por Internet), animó a la ciudadanía a seguir firmando. Buscan el respaldo de la Cámara gallega y en última instancia que, si es preciso, se impulse una modificación legislativa para que este tipo de actuaciones no queden impunes.
El juzgado que archivó el caso entendió que con las grabaciones no quedó suficientemente acreditado que se hubiese cometido un delito en el sentido recogido en el Código Penal, al no vulnerarse la intimidad de las mujeres que aparecen orinando en los vídeos porque las imágenes se tomaron en un lugar público, «en el que podían ser vistas por cualquier persona que por allí transitase», dice el escrito judicial.
Lo que se sostiene en los recursos es que las grabaciones fueron realizadas mediante la colocación de al menos dos cámaras ocultas, instaladas en una zona que, si bien es una vía pública, es un callejón aislado que usan las mujeres que acuden a la multitudinaria fiesta de A Maruxaina para orinar ante la insuficiencia de los urinarios existentes, tanto en locales de hostelería como con los auxiliares que monta el Concello. En al menos uno de los recursos se pide también que se amplíen las diligencias para determinar si han sido grabadas y divulgadas imágenes con menores de edad o con discapacidad.
Otros pasos que se han dado han sido reclamar la intervención de la Valedora do Pobo, que según explicó Mary Fraga ha iniciado una investigación. «Puesto que el juez sustenta su decisión en que las imágenes fueron grabadas en la vía pública, pedimos que se aclare si había servicios públicos suficientes, si se cumplió la normativa para una fiesta con tanta gente», indicó.
Además, se recurrió a la Secretaría Xeral de Igualdade y al Observatorio Galego contra a Violencia de Xénero, logrando que hoy se trate el asunto de las grabaciones en el Consello Galego da Muller. «Si existen estos órganos es para algo. Su implicación es necesaria en casos así», concluyó Mary Fraga.