Ourol, Xove, O Valadouro, Alfoz y Barreiros optan por la cautela y seguirán este mes con prohibiciones de lavar coches, llenar piscinas o baldear calles por la sequía
07 sep 2023 . Actualizado a las 05:00 h.La gran mayoría de los Concellos mariñanos que adoptaron prohibiciones de los usos no esenciales del agua mantendrá previsiblemente en septiembre estas medidas. El lavado de coches, el llenado de piscinas y los baldeos de calles haciendo uso de la traída seguirán por el momento vetados en Ourol, Xove, Alfoz, O Valadouro o Barreiros. Pese a un generalizado descenso del consumo, a causa del menor número de turistas, y a que la lluvia ha aparecido por fin por la zona, los gobiernos municipales no se fían de un mes habitualmente seco y llaman a la cautela.
Ribadeo y O Vicedo han sido los únicos Concellos mariñanos que han levantado las restricciones. En el caso del gobierno municipal ribadense, lo hizo el pasado día 5, a las puertas de las fiestas patronales, pidiendo no obstante el alcalde, Daniel Vega, que los vecinos hagan «unha xestión coherente da auga». El ejecutivo municipal vicedense había tomado una única medida, la de cerrar las duchas de las playas, «vendo que se estaba a facer un uso irresponsable das mesmas. Nalgúns casos, turistas enchían as súas autocaravanas con elas», lamenta el regidor, Jesús Novo. Ante la bajada del consumo en septiembre, optó por reabrir este servicio.
En O Valadouro no se prevén novedades al respecto en las próximas semanas. «Os depósitos están ben, practicamente todos ao 100 % agás o de Budián, co que hai un problema que tratamos de identificar, non sabemos aínda se de captación. Neste lugar tivemos que cortar o servizo por horas e poñer tubería nova. Pero temos roturas no sistema de traída e ademais setembro é un mes habitualmente seco, de aire quente e propicio para os incendios. Daquela non prevemos retirar o bando ata que veña un tempo de outono, porque non podemos derrochar o recurso», aclara la alcaldesa, María José Fernández.
Tampoco plantea levantar las restricciones adoptadas en Ourol el regidor, José Luis Pajón. «Non temos por agora unha seguridade sobre a abundancia de auga. Polo momento dependemos do clima», expone.
En Xove, además de las restricciones habituales se optó por suspender el servicio de las duchas de las playas. Demetrio Salgueiro indica que «a situación mellorou moito coas chuvias da semana pasada e xa non é tan preocupante. Algúns depósitos están ao 95 % e outros ao 100 por cento, pero as captacións continúan baixas e por agora non levantaremos medidas por prudencia, ata que a melloría sexa definitiva», argumenta.
La edil barreirense Montse Porteiro señala que dados los problemas que arrastra el sistema de traída municipal, y ante la previsión de un septiembre seco, «optamos por non retirar o bando. Consideramos que é mellor continuar con este esforzo de todos que levantar as restricións e logo igual ter que volver activalas. A xente non entende bandazos, con toda lóxica», afirma.
Foz
También en parte motivada por la sequía, la recomendación de no beber ni cocinar con la traída a causa de valores excesivos de trihalometanos se mantiene en Foz, donde se hacen analíticas cada dos días.
El agua del grifo sale marrón en Xove por el arrastre de partículas
Vecinos de Xove advertían ayer de que el agua del grifo salía turbia, con color marrón. El alcalde admite esta situación, «que entra dentro da normalidade nestes casos. Cando baixan tanto os niveis das tomas, e logo chove de golpe, sempre hai materiais de arrastre que van cara as captacións. Ás veces non se dan eliminado, pese a que instalamos novos filtros este mesmo inverno. Trátase dunha cuestión puntual e ao ir entrando auga nova, en días, mellorará a situación. A imaxe non é desexable pero non hai risco para a saúde», indica.
Sistemas de traída obsoletos, un lastre que agrava la falta del recurso en Barreiros y O Valadouro
En algunos municipios, el problema de la escasez de agua se agrava por sistemas de traída antiguos e ineficientes. El principal ejemplo en A Mariña es Barreiros, el segundo concello de Galicia que más carga poblacional asume en verano en función de sus habitantes. A un aumento de consumo «esaxerado» este año se suman unas conducciones de los años 60, pensadas para 3.000 habitantes cuando el ayuntamiento barreirense asume en agosto unos 12.000. La red es tan vieja que no permite, por riesgo de colapso, cortes puntuales del servicio.
El Concello asegura que la escasez de agua «é un tema recurrente que en diante haberá que abordar», y pidió a los técnicos municipales una valoración «das obras máis urxentes a facer». La solución para Barreiros necesitará de financiación de otras Administraciones, y para ello solicitó audiencia al presidente de la Xunta, Alfonso Rueda.
O Valadouro no asume la población flotante de Barreiros, pero también sufre cuando se acentúa el consumo por una traída «con múltiples roturas que implican perdas de auga. Temos un sistema obsoleto. Hai un tramo con seis empates feitos, outro treito con doce fugas contabilizadas en 150 metros. Estamos poñendo cañerías novas e haberá que facer un investimento importante», subraya Fernández, que coincide en que los Concellos tendrán en adelante que anticiparse a posibles episodios de sequía, en especial cuando A Mariña recibe cada vez a más turistas. «Temos que buscar puntos de captación e depósitos novos», apunta.