La Mostra de Viveiro, una ventana abierta a la multiculturalidad que repite gran éxito de público

y. garcia VIVEIRO/LA VOZ

VIVEIRO

Xaime Ramallal

Por la cita de Bágoas da Terra pasaron más de 250 grupos a lo largo de su historia, iniciada en 1979 y con la Gran Gala Internacional como broche de oro

07 ago 2023 . Actualizado a las 05:00 h.

Desde Viveiro, este domingo se podía viajar casi al gusto de cada uno por el mundo entero. Si por un lado en los jardines Noriega Varela los destinos eran más bien gastronómicos, por ejemplo a Alemania o México a través de la oferta de las foodtrucks de la tercera Feira da Cervexa BeerVeiro, en la Praza Maior daba comienzo al anochecer otro recorrido por cuatro continentes sin salir de la ciudad del Landro. El corazón del casco histórico se abarrotó de público, que aplaudió cada pase grupal, anunciado por el ya veterano presentador de la Gala, Julio Giz Ramil, en el broche de oro de la 43ª Mostra Folklórica Internacional. Y como bien él decía, «cos brazos en alto e o sorriso» de bailarines y músicos que representaban a sus respectivos países, abriendo el festival el anfitrión Bágoas da Terra, con ese mismo sentir universal y que es la conexión que el folclore brinda, sea cuál sea su origen.

Xaime Ramallal

Lo que demostró una vez más la Mostra viveirense, dirigida por Maricarmen López «Chipe», es su clara identidad como ventana abierta de par en par a la multiculturalidad, recurriendo a la tradición como un lenguaje que a diferencia de un idioma es más fácilmente comprensible. Yihui Dance Theatre de Taiwán, Alas de mi Patria de Chile y Otrora de Colombia (que ofrecieron el sábado el espectáculo «Especial Sudamérica»), African Tumbas de Kenia y Nikola Tesla de Belgrado se sumaron a una larga lista de 255 grupos que han pasado por la Mostra a lo largo de su historia, iniciada en 1979. Abría la cita con el sabor local de Bágoas, seguida de la delicadeza asiática de Taiwán y el carácter latino de Chile, mientras entre bambalinas gente del público se hacía selfies con los keniatas, que llamaban la atención por su gran exotismo.