Ante el Valladolid sufrió un esguince en un dedo y empezó la semana con una férula, pero confía en volver al grupo hoy o mañana
09 ene 2013 . Actualizado a las 21:29 h.Con más de cuatrocientos partidos en la ACB y tres participaciones en la Copa del Rey (98/99 con el Barcelona, 07/08 con el Alicante y 08/09 con el Estudiantes), la de Oriol Junyent es una de las voces del Obradoiro Blusens Monbus que puede hablar con más conocimiento de causa acerca del torneo más vistoso de la temporada, de lo que cuesta llegar a él y de lo que supone jugarlo.
Comienza por significar que «es una competición mágica, sobre todo porque un equipo pequeño tiene las opciones de poder ganarla. No es lo mismo que el play off, a tres o cinco partidos. A uno, puede pasar cualquier cosa. También está el ambiente que se vive, con muchas aficiones juntas».
Eso es lo que le espera al Obradoiro si consigue ganar en Badalona el domingo o, en caso de perder, si le favorecen los resultados del Estudiantes-Barcelona y del Unicaja-Cajasol.
El pívot catalán sufrió un esguince en un dedo de la mano derecha ante el Valladolid y ayer lucía una férula, pero quitaba importancia al percance. De hecho, confía en que hoy o mañana ya pueda ejercitarse con el grupo. No quiere perdérselo.
En cualquier caso, tiene los cinco sentidos puestos en Badalona. Por delante asoma un partido más y una semana de trabajo que sigue las pautas de cualquier otra. Pero hay connotaciones especiales: «Hay algo más de nervios, de ansiedad, porque queremos entrar en la Copa. Lo importante es que nos los quitemos lo antes posible. El Joventut no tiene opciones para la Copa, pero sí en la Liga. Lleva siete victorias y está jugando a un gran nivel. El otro día, frente al Real Madrid, hizo un gran partido. Va a ser muy complicado».
Rival bien armado
Tiene claro el retrato robot del conjunto de Maldonado: «Dispone de jugadores duros, que les dan consistencia, como Savané, Oliver, Kuzmiz... Y tienen jugones que, si cogen el día, son difíciles de parar, como Gafney, Quezada, Fisher... Es importante que no entren en el partido y que juguemos una defensa muy dura. Igual en los últimos partidos hemos aflojado un poco. Creo que tenemos que ser más duros atrás. Es nuestra clave».
Oriol Junyent subraya que el equipo se ha ganado a pulso llegar a la jornada decisiva dependiendo de si mismo. «Y ahora no podemos desfallecer», apunta. En esa línea está volcando sus esfuerzos todo el colectivo.