Considera claves las pérdidas de balón combinadas con las acciones de calidad del Valencia en el último cuarto
09 oct 2023 . Actualizado a las 19:15 h.Moncho Fernández acabó triste y al mismo tiempo orgulloso. No fue una dulce derrota, porque todas duelen, pero el equipo peleó por su suerte hasta el final con carácter, nunca se resignó. Y esos dos factores se instalaron en el ánimo del Alquimista de Pontepedriña a la conclusión de la contienda.
Comenzó por apuntar que el Obradoiro sí logró uno de sus propósitos: «Cuando vienes a jugar a una pista de Euroliga, el objetivo de un equipo como el nuestro es ser competitivos y tener opciones de victoria al final. En nuestro caso, especialmente, cuando llevas tantos partidos acumulados en tan poco tiempo. Hemos conseguido llegar al final con opciones de victoria».
Pero faltó coronar, por detalles: «Un par de pérdidas un poco tontas, quizás fallos en acciones que normalmente podemos anotar, algún tiro cómodo, alguna bandeja, y sobre todo la calidad de Valencia, que ha metido unas canastas excepcionales en el último cuarto, tanto la de Jones como la de Davies, como la de Kass. Todo eso ha sido definitivo para que el partido se cerrara».
En ese punto fue cuando explicó su estado de ánimo: «Me voy triste por la derrota, lógicamente, pero debo reconocer el esfuerzo de los jugadores, su empuje, su empeño. Incluso cuando Valencia alcanza esa ventaja de diez puntos en el último cuarto somos capaces de seguir y volvernos a meter en el partido. En ese aspecto, contento, por cómo hemos jugado, por el esfuerzo de los jugadores. Triste por la derrota».
Hubo dos pérdidas muy al final que resultaron definitivas. Sobre la posibilidad de que pesase el cansancio en ese momento, Moncho Fernández indicó: «No sabría decir cuál es la causa. A lo mejor es el cansancio, porque no solo es este partido, son los viajes y muchos encuentros acumulados. También es la buena defensa de esos jugadores tan físicos que tiene Valencia, sin ningún tipo de dudas. Son definitivas porque son en el tramo final».
En cualquier caso, quiso poner en valor que hubo buenas acciones atrás que no encontraron premio: «Sin embargo, enfrente me viene esa buena defensa que hacemos con Jones y que mete esas canastas que él suele meter, o la que mete Davies con una excepcional defensa de Pustovyi y Eric Washington, que estaba haciendo el dos contra uno. O el triple de Kassius, que está defendido por dos jugadores y además es triple y falta. Creo que se han unido los dos factores, esas pérdidas y la calidad del equipo local».
Sobre el último arreón del Obradoiro, comentó: «No le puedo reprochar nada a los jugadores. Cuando parecía que el encuentro estaba perdido, han seguido. Para una plantilla como la nuestra, que lleva seis partidos en menos de diecisiete días, que es muchísimo para nosotros, con viajes largos, muy exigentes, a lo mejor lo normal es que el equipo se derrumbe físicamente». Pero tanto la respuesta física como la mentalidad fueron sobresalientes: «Por eso estoy muy contento. Si el equipo cayera en el tramo final y acabas perdiendo por quince, pues a lo mejor entraría dentro de la lógica. Y no ha sido así. Por eso estoy dolido por la derrota pero contento por el despliegue de los chicos.