El escultor dirigió la instalación de la escultura en la plaza de San José Méndez y Lores se sentarán hoy junto a los seis tertulianos que forman el grupo
12 ene 2006 . Actualizado a las 06:00 h.?uede que esta tarde y después de mucho tiempo, el director general de Caixa Galicia, José Luis Méndez, y el alcalde pontevedrés, Miguel Anxo Fernández Lores, se sienten a protagonizar una distendida tertulia, claro que a ello ayudará que el tema de conversación no será Ence. Al menos, eso es lo que espera el artista César Lombera, que ha realizado el grupo escultórico encargado por la entidad financiera para culminar la reforma de la plaza de San José. Su obra, que representa a seis de los tertulianos más conocidos del Café Moderno, fue instalada ayer bajo la dirección del escultor y con ayuda de un camión grúa, en un proceso que se prolongó durante tres horas. «Ha salido todo como estaba previsto -indicó Lombera- y eso que era una instalación complicada, porque son varias figuras y unas se apoyan sobre otras. Pero al final se ha hecho en menos tiempo del que pensábamos». La instalación de la escultura generó una gran expectación en la plaza y, aunque los personajes permanecen tapados hasta la inauguración de esta tarde (19 horas), se pueden vislumbrar las figuras que protagonizan el grupo. «Cuando estábamos montándola, la verdad es que los comentarios eran bastante positivos -señala Lombera-. Yo creo que el grupo completo va a funcionar y espero que el hecho de que haya sillas vacías junto a los protagonistas invite a los ciudadanos a sentarse y fotografiarse, de modo que la escultura establezca un diálogo con la ciudad». Figuras Sobre la peana instalada por el Ayuntamiento figuran dos mesas alrededor de las que están sentados Alexandre Bóveda, Alfonso Daniel Rodríguez Castelao, Valentín Paz Andrade y Ramón Cabanillas. El tertuliano más moderno, Carlos Casares, permanece de pie apoyado sobre estos dos últimos presenciando la escena, en la que el grupo asiste a la actuación del violinista pontevedrés Manuel Quiroga. En su conjunto, la escultura pesa dos toneladas, según explicó ayer el autor en Radio Voz Pontevedra, y está realizada en bronce, aunque con patinas que le dan distintos acabados y tonalidades en las figuras. César Lombera destacó también el aseguramiento de la obra, de cara a evitar posibles daños. «Creo que es muy resistente y difícil de romper y tampoco creo que la puedan pintar -añadió el creador-. Aunque está claro que el grado de nivel cívico es difícil de predecir».