
El servicio es gratuito para los vecinos del municipio y de pago para el resto El estreno del servicio coincide con la puesta en marcha del punto limpio
26 may 2007 . Actualizado a las 07:00 h.Ya no hay disculpa para no depositar los escombros de obra en un lugar adecuado. Desde hace días ha entrado en servicio la planta de reciclaje de materiales procedentes de la construcción, de Valga. Es la primera que funciona en la zona de Arousa y es, también, la primera instalación pública de este tipo que existe en el norte de la provincia Pontevedra dado que la única que hay es de carácter privado. En Silleda hay un vertedero público de escombro pero no incluye tratamiento de residuos. La previsión de la Consellería de Medio Ambiente es que las próximas plantas abran en Sanxenxo y Forcarei. Entre tanto, Valga será el punto de referencia para empresas de la construcción y particulares que tengan que deshacerse de los restos de las obras. Sólo tienen que acercarse a las instalaciones construidas en Campaña, al lado de la depuradora, en horario de mañana y tarde, de lunes a viernes, y los sábados de mañana. El teléfono de contacto es el 627943160. Los mismos horarios y el mismo número de contacto que tiene el punto limpio, el cual también acaba de abrir sus puertas. Ambas plantas están gestionadas por la unión de empresas L. Secope, S. A. y Nemesio Ordóñez, S. A., que optaron a la concesión del servicio después de un concurso público. Los servicios son de carácter gratuito para los vecinos de Valga y de pago para los procedentes de otros municipios. Recogida puerta a puerta El Concello informa que, pese a la puesta en marcha de ambas plantas, seguirá prestando el servicio de recogida de residuos voluminosos puerta a puerta el último miércoles de cada mes, tal y como se venía haciendo hasta la fecha. Los usuarios sólo tendrán que contactar previamente con el Concello. La planta de tratamiento de escombros está dimensionada para un mínimo de cien toneladas al día, lo que supone entre 20 y 50 contenedores. Según consta en el proyecto, el objetivo es conseguir reciclar el 50% de los vertidos. El proceso de funcionamiento se divide en cinco apartados. El primero consiste en una clasificación básica por la cual se separan los residuos de mayor tamaño como pueden ser plásticos, vidrios, metales, maderas y grandes trozos de hormigón. En la segunda fase, llamada de cribado, el residuo restante se introduce a través de un alimentador en una criba giratoria que separa los áridos finos (de menos de veinte milímetros) del escombro. El tercer paso consiste en separar de los residuos, mediante corrientes de aire, los plásticos, porespán, cartones, papeles y demás ligeros. El cuarto proceso permite la separación de materiales férreos y en quinto lugar se aborda la fase de «triaje», por la cual el material se envía a una cabina de separación manual en donde se clasifica la madera, el cartón, papeles y plásticos de mayor tamaño, materiales no férreos o cualquier otro elemento reciclable. El resultado es una fracción de árido limpio de más de veinte milímetros que puede ser reutilizado en rellenos, drenaje de muros o incluso como materia prima para plantas de trituración. Esta planta de reciclaje está ubicadas en unos terrenos adquiridos por el Concello para este fin, junto a la depuradora y el punto limpio. Fue construida en el año 2005 por la Consellería de Medio Ambiente y financiada con fondos de cohesión. Su presupuesto ascendió a 596.451 euros. Su construcción pone a Valga a la cabeza en lo que a prestación de servicio de recogida y tratamiento de residuos se refiere ya que logra así una meta que se habían ya marcado, sin éxito, otros municipios de su área de influencia como es el caso de los de la Mancomunidade do Salnés. En lo que no ha logrado ser puntero es en la prestación de servicios del punto limpio pues ya son varios los municipios de la zona de Arousa que cuentan con él. Desde este mes en Valga también. Allí pueden acudir los vecinos a depositar todo tipo de residuos excepto materia orgánica y materiales industriales. La lista es amplia: desde el colchón y la nevera vieja hasta pilas, latas, vidrio. barnices y aceites.