Por Dereito dio a conocer su actividad la semana pasada con sendas fiestas en Vilagarcía y Cambados. Su objetivo era informar sobre una enfermedad que muchos desconocen.
-¿Cómo valoran las jornadas?
-Quedamos muy contentas. No esperábamos que las respuestas de los concellos fueran tan adecuadas, ni que la gente participara de esa forma. En los dos casos planteamos la misma actividad, que se hicieran unos dibujos con tiza, y en Vilagarcía decidieron incluso hacer ellos mucho más.
-¿Sirvió para darse a conocer?
-Yo pienso que darnos a conocer sí que lo logramos. La enfermedad, puede que menos. Pero la gente preguntaba mucho y es bueno que haya curiosidad. Para ser el primer año estuvo bien. Con los niños hubo más toma de contacto porque les contamos un cuento sobre el autismo.
-A pesar de todo ¿el autismo sigue siendo un gran desconocido?
-Sigue siendo el gran desconocido, por desgracia. Hay unos estereotipos creados que hacen mucho daño. Se cree que todos los autistas son iguales y el espectro es muy amplio. Se cree que todos son discapacitados intelectuales y no es así. Que no se pueden relacionar con los demás y, para nada.
-¿Tienen programadas más actividades para este año?
-En principio no. Ahora nos queda el trabajo con las administraciones para exigir los derechos de nuestros hijos, como la escolarización.