
La firma catalana llevaba buscando una empresa en Rías Baixas desde que tuvo que abandonar el pazo de Baión
20 jun 2013 . Actualizado a las 06:53 h.El grupo catalán Freixenet es el nuevo propietario de la bodega Agnus Dei, la empresa de Meaño propiedad de Novagalicia Banco. La entidad bancaria hizo ayer público un comunicado en el que informaba de los activos que se había comercializado. Y, entre ellos, figuraba la firma adscrita a la denominación de origen Rías Baixas. Con esta adquisición, Freixenet culmina su plan para asentarse en la denominación del albariño.
Pazo Baión fue la primera finca en la que el grupo catalán puso sus ojos. Cuando el terreno estaba en manos de la administración concursal, Freixenet se encargó de su gestión y llegó a alquilarla durante un tiempo. Allí produjo su primer albariño, Vionta. Pero cuando la finca salió a concurso fue la cooperativa cambadesa Condes de Albarei la que se quedó con la misma, dejando a los catalanes sin parcelas y sin bodega en la que elaborar sus caldos. Desde entonces, ha habido muchos rumores sobre los intereses de este grupo en Rías Baixas.
Hace ya algún tiempo que se sabe que Freixenet estaba a la búsqueda de una bodega que poder adquirir en el entorno de esta denominación de origen. Y se sabía también que tenía la mirada puesta en la zona de O Salnés. La elegida, finalmente, fue Agnus Dei, la empresa que Novagalicia Banco puso en marcha en Meaño en el año 2005 a través del grupo Vinum Terrae.
Según diversas fuentes consultadas, la operación de comprar afecta a la sede de Meaño y a toda la maquinaria que hay en el interior de este inmueble. El mismo no solo acoge la bodega, sino también un salón para congresos y ceremonias. Las negociaciones comenzaron hace solo seis meses y el acuerdo no afecta al grupo Vinum Terrae, del que Novagalicia Banco sigue manteniendo el 98 % de la titularidad. La venta afecta a la sede social de Meaño, pues los viñedos siguen en manos de la entidad bancaria y serán alquilados a la firma catalana.
La operación permitirá a Freixenet disponer de una bodega propia, con sus correspondientes viñedos. Un objetivo que el grupo lleva años persiguiendo con el fin de asentarse en la denominación de origen del albariño. El grupo catalán dispone ahora de instalaciones y viñedos para seguir elaborando sus propios albariños que, hasta ahora, utilizan la marca Vionta.