El Parque Nacional de las Illas Atlánticas es uno de los principales atractivos turísticos de Galicia como destino. En los últimos años la creciente demanda de visitas a las Cíes, hizo actuar a la administración y regular el número de personas que llegan; lo que técnicamente se relaciona con la capacidad de carga de un lugar y nada fácil de gestionar en espacios abiertos, como es el caso. Intereses opuestos y complicado equilibrio: el interés económico de las empresas cuyo objetivo principal es la rentabilidad económica, contra el interés general comunitario que debería ser el desarrollo de un turismo sostenible.
En cuanto a las otras islas del Parque, la Isla de Ons con visitas regulares, en titulares este verano por la inauguración de un eco cámping; Sálvora con una aldea sin contenido para la que existe un proyecto del arquitecto César Portela. Y Cortegada, la isla a la que se va caminando en algún día del año, sin visitas regulares como la anterior, con su excepcional bosque de laurel.
Las islas ofrecen mucho más que paisajes, caminatas o rutas de senderismo y cada una de ellas tiene su potencial. Ahí reside una oportunidad turística de estrategia en turismo sostenible sin atender: posicionar con una marca los diferentes atractivos de cada una de las islas de manera coordinada desde la Administración en colaboración con las empresas privadas ofreciendo igualdad de condiciones.