«En Vilagarcía tenemos a gente que está viviendo en caravanas o en coches particulares y no lo denuncia»

Serxio González Souto
S. GONZÁLEZ VILAGARCÍA / LA VOZ

AROUSA

SIMÓN BALVÍS

22 mar 2019 . Actualizado a las 05:00 h.

Ocho año después de que la plataforma Stop Desahucios se constituyese en Arousa, a su portavoz no le extrañan los números que refleja el informe del CGPJ. «Esto -augura Pena- va ir a más».

-¿Es que no se han tomado medidas, después de tantas campañas en los últimos años?

-Se tomaron medidas en el 2012 y el 2013 con el tema de la vulnerabilidad y el código de buenas prácticas. La mayor parte de las entidades financieras prefieren negociar y llegar a acuerdos con las familias antes de crear conflictividad. El problema es que mientras no se adopten decisiones reales esto no va a parar.

-¿Qué habría que hacer?

-Aprobar una ley hipotecaria en condiciones. De otra forma será complicado parar las ejecuciones porque, cuando hay deudores, es lógico que los propietarios, sean bancos o particulares, ejerzan acciones legales. Nosotros instamos a la Administración a que tome cartas en el asunto porque son ellos quienes deben garantizar una vivienda digna a las familias. Y si se producen desalojos, tendrán que llevarse a cabo los realojos oportunos, haya menores o no. Incluso si se trata de una sola persona, que no por ello deja de tener derecho a una vivienda digna. En Vilagarcía o Ribeira tenemos a gente que está viviendo en caravanas o coches particulares y en muchas ocasiones no lo denuncia.

-¿Qué hay de la célebre dación en pago?

-Es una de las cuestiones que solicitamos. Que se obligue a las entidades bancarias a aceptar la dación en pago, con la entrega voluntaria de la vivienda como cancelación de la deuda. Además, trabajamos para que, cuando se trate de deudas con la Seguridad Social y Hacienda de gente con pequeñas empresas, esas deudas se condonen siempre que sea de buena fe. No es justo que alguien se quede sin bienes porque su negocio va mal, pero sus deudas con la Administración sigan ahí, como un sambenito, cuando eso no es lo que sucede con las grandes empresas. También nos encontramos con gente fuera de los cauces de financiación habituales, que recurren a prestamistas. Auténticos buitres que piden como aval las viviendas e imponen intereses abusivos. Insisto, esto continuará y la gente seguirá tirándose de los balcones mientras no tomemos medidas.

La plataforma Stop Desahucios reclama una ley hipotecaria en condiciones.