08 may 2019 . Actualizado a las 21:38 h.
Hace años que se colocó, en el islote de A Lanzada, un banco desde el que disfrutar, cómodamente sentados, del fenomenal paisaje que la naturaleza ha creado para nosotros. Desde hace una semana, ese banco, además de ser un símbolo de la Galicia más bonita, se ha convertido también en un símbolo del amor romántico. Vecinos de Noalla han colocado en el asiento de madera una cadena que pretende facilitar que todos los enamorados que por allí pasen, dejen un recuerdo de su devoción mutua. Los primeros candados ya han aparecido. foto ramón leiro