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Viernes 13 y en estado de alarma: la boda que Cecilia e Isidoro no van a olvidar

Rosa Estévez
rosa estévez VILAGARCÍA / LA VOZ

AROUSA

MONICA IRAGO

«La ceremonia la tenemos para el 9 de mayo, en una finca, pero tal y como se están poniendo las cosas, decidimos adelantarnos», dicen

14 mar 2020 . Actualizado a las 16:51 h.

La tarde, la verdad, era perfecta para una boda. La atmósfera luminosa, el cielo azul, la temperatura agradable... A las puertas del consistorio de Vilagarcía, Isidoro y Cecilia, la pareja de novios, sonreía tras haberse dado el sí quiero. Hasta ahí, todo normal. A partir de ahí, las rarezas que nos imponen estos tiempos locos. Cecilia e Isidoro celebraron su boda en una intimidad forzada por las circunstancias. «La ceremonia la tenemos para el 9 de mayo, en una finca, pero tal y como se están poniendo las cosas, decidimos adelantarnos». Se casaron solo unas horas después de que Pedro Sánchez anunciase que se va a decretar el estado de alarma. «Viernes y trece y en estado de alarma... El día de nuestra boda no lo vamos a olvidar nunca, eso seguro», bromeaba él, mirando a su mujer con ternura.

Viendo como su boda naufragaba en medio de la pandemia, ambos eligieron abrazar el humor en lugar de los lamentos. «Es todo un lío», confiesan. «A mí, lo que más me duele es lo de mi despedida de soltero. Íbamos a ir a Marruecos, nos marchábamos el próximo jueves, pero hemos tenido que cancelarlo. Y mis amigos llevaban mucho tiempo organizándolo», cuenta Isidoro. A su lado, uno de sus frustrados compañeros de viaje asiente. «Estábamos dispuestos a ir, íbamos a hacer seguros médicos y todo eso, pero ya no hay opción», señala.

Cecilia no sabe si podrá, o no, celebrar su despedida de soltera póstuma. «Es en abril». ¿Recuperaremos la normalidad para entonces? Es la pregunta del millón, para la que no existe respuesta. «De momento nos vamos a pasar una semanita encerrados en casa», dice ella. Sonríe. Y es que, aunque el mundo a su alrededor parece haber enloquecido, esta pareja se alimenta de la ilusión por el camino que han iniciado juntos. Un amigo llega corriendo al Concello. «Llegas tarde, ya nos casamos», le dicen. Y se marchan todos juntos a celebrar el amor y la felicidad.