Lidia Luna: «Las mujeres, en muchos casos, no tenemos palabras ni para nombrar lo que nos pasa, porque no se las hemos escuchado a nadie»

Las palabras importan. Importan tanto, que aquello que no se nombra puede parecer que no existe. Lidia Luna, que es psicóloga y narradora, ha construido su proyecto profesional sobre las palabras y la necesidad de usarlas, de pronunciarlas, de hacerlas atravesar el aire. Ha partido de esta premisa para diseñar el proyecto que el día 22 de septiembre arrancará en A Illa: un grupo de acompañamiento dirigido a mujeres de todas las edades para facilitarles recursos con los que manejar y mejorar su salud, explorar caminos para alcanzar un bienestar tanto físico como emocional, afrontando procesos y realidades que, en muchos casos, tienden a permanecer ocultos. «El ser humano funciona como un juego de espejos: las personas nos vemos reflejadas en lo que les pasa a los demás. Las mujeres, en muchos casos, no tenemos ni palabras para nombrar lo que nos pasa, porque no se lo hemos escuchado nombrar a nadie», explica.

Es esa densa capa de silencio la que hace que siga habiendo adolescentes de 14 años «que vivan la menstruación como un castigo», o mujeres que se adentran en la menopausia sin entender qué le está ocurriendo a su cuerpo, sin saber interpretar sus señales. «Encontrar un sitio en el que poder hablar de la menopausia desde un lugar amable» fue, precisamente, el motor de arranque de la actividad que Lidia Luna desarrollará en A Illa. «Parece mentira que esta situación ocurra. Un día, hablando con una compañera, nos dimos cuenta de que para la menopausia no hay una narrativa. Y si no la tenemos nosotras... Pienso mucho en nuestras madres y abuelas, que son nuestras referentes y que sufrieron mucho más silencio. Y también en mujeres más jóvenes que no deben sufrirlo». Precisamente por eso, señala la promotora de esta actividad, es importante que se estén «empezando a abrir espacios para poder nombrar lo que nos pasa. Porque esta sociedad machista y patriarcal siempre ha colocado la salud de la mujer por debajo de la del hombre. El hombre es la medida de todo, y a nosotras se nos ha dejado durante mucho tiempo sin ni siquiera palabras para nombrar lo que nos pasa».

El objetivo del grupo de mujeres que se pondrá en marcha el día 22 en A Illa es, precisamente, contribuir a abrir esos espacios, a conquistar palabras y, a partir de ahí, a conocer y reconocer las características, necesidades y procesos del cuerpo femenino en cualquier momento de su vida. Para ello, se organizarán reuniones mensuales de tres horas —de 17.30 a 20.30—. «Al principio pensé en hacer estos encuentros en Vilagarcía. Pero llevo años viviendo en A Illa y siempre he recibido mucho de este lugar y de su gente. Así que he decidido empezar aquí», explica

---

---

---