
El pacto, que aún se está negociando, no prevé la incorporación del Bloque al gobierno
13 ene 2024 . Actualizado a las 18:21 h.El Partido Socialista y el Bloque Nacionalista Galego anunciaron ayer que ambas formaciones han abierto una negociación que tiene como objetivo «dar un paso máis para afianzar a gobernabilidade do Concello e continuar avanzando na procura de melloras para o conxunto da cidadanía». Para ello, ambos partidos pretenden alcanzar «un pacto con vixencia para o que resta de mandato». Un pacto «que as dúas formacións esperan concretar moi pronto, xa que coinciden en que son máis os puntos que os unen que os que os separan».
Este paso no resulta sorprendente. A fin de cuentas, desde el inicio del mandato, entre el gobierno del socialista Alberto Varela y el BNG ha habido buena sintonía. Se llegó a acuerdo para la investidura y se mantuvo, aunque con sus altibajos, durante los siguientes meses. Así que ahora, a las puertas de la negociación de los presupuestos municipales y con unas elecciones autonómicas en el horizonte, escenificar en una ciudad como Vilagarcía el buen entendimiento entre las dos fuerzas que aspiran a dar un vuelco a la Xunta se antoja un movimiento útil.
El acuerdo aún no está hecho. Comenzó a fraguarse, comentaba ayer el portavoz del BNG Xabier Rodríguez, «nunha serie de encontros nos que coincidimos xente do Bloque e do goberno», en los que fue tomando cuerpo la idea de estructurar y dar forma a esa buena sintonía entre ambas formaciones.
De alcanzarse un pacto, este en ningún caso contemplaría la entrada de los nacionalistas en el gobierno local, ni la asunción de ninguna concejalía.
De lo que se ha hablado ya en una primera reunión, a la que asistieron Alberto Varela y Tania García por el PSdG y Xabier Rodríguez y Rosa Abuín por el BNG, es de establecer fórmulas y mecanismos de trabajo que permitan a los nacionalistas tener información directa y ágil de los proyectos del gobierno, estableciendo además canales para que este partido, desde «unha oposición construtiva», formule sus propuestas y sugerencias, «facendo máis produtivo o noso traballo e permitíndonos optimizalo», en palabras de Rodríguez.
El alcalde, Alberto Varela, apuntaba en la misma dirección. «Existe un bo entendemento co BNG e do que se trata, basicamente, é de estandarizar e establecer reunións de traballo que faciliten a colaboración polo ben da cidade», apuntaba el regidor.
Desde el BNG reconocen que la relación con el gobierno es buena. «Hai feridas, como a do pleno de organización na que o PSdeG buscou o apoio do PP a cambio dunha concellaría liberada e un xefe de prensa para os populares. Pero esas feridas están cicatrizando, e consideramos que non é o momento de ir a unha guerra. Pensamos que é o momento de fuxir da demagoxia, ese nicho xa o están ocupando outras forzas políticas», aseguró Rodríguez, quien quiso subrayar que «nós tendemos a man, pero imos facer valer as nosas opinións e os nosos posicionamentos». Es decir, que el Bloque Nacionalista Galego no concibe este acuerdo de estabilidad como un cheque en blanco para el PSOE.
Tras la primera reunión oficial para negociar la apertura de este nuevo escenario, los dos partidos aliados pretenden volver a reunirse la próxima semana para continuar avanzando en ese «pacto global para axudar a construír a Vilagarcía do futuro e evitar o bloqueo de iniciativas vitais para o desenvolvemento da cidade».
Presupuestos, plan de movilidad, o PXOM, algunas de las cuestiones que se quieren agilizar
Son varios los asuntos que el PSOE y el BNG han puesto en el centro de este pacto de estabilidad. Proyectos y acciones que «hai que sacar adiante nos próximos anos» y para los que ambas formaciones están dispuestas a aunar fuerzas.
presupuestos
Evitar prorrogarlos. Es, probablemente, la negociación más inmediata que deberán acometer socialistas y nacionalistas. «Estamos cuns orzamentos prorrogados e é necesario aprobar uns novos», explica el BNG.
plan xeral
La ordenación de la ciudad. El documento que traza las líneas maestras del desarrollo de la ciudad ha atravesado por todo tipo de vicisitudes. Socialistas y nacionalistas quieren darle un empujón que resulte definitivo.
plan de movilidad
Un tema estrella. El plan de movilidad, dice el BNG, «ten visión de futuro e fai propostas e aporta solucións que van máis alá do curto prazo». De ahí, su buena disposición a apoyar acciones en este ámbito, una de las materias estrella del gobierno del PSOE.
axuda no fogar
Dándole una vuelta. Toda vez que la propuesta del BNG de remunicipalizar ese servicio fue descartada por el pleno, el grupo nacionalista quiere meter mano en la redacción de las bases del nuevo pliego de condiciones que determinará qué empresa se hará con su gestión. Por lo demás, los nacionalistas consideran que hay un gran campo de actuación en materia de asuntos sociales, a los que prometen prestar una especial atención.