Los empresarios dispondrán de contenedores específicos, que serán vaciados diariamente, seis días de la semana en horario de tarde, por una empresa que desplazará una furgoneta a los bares, hoteles y restaurantes participantes
10 mar 2020 . Actualizado a las 05:00 h.Es una iniciativa pionera que ayer vivió su pistoletazo de salida con el acto protocolario de la firma del contrato. Cambados pone en marcha una iniciativa de compostaje puerta a puerta para los negocios de restauración. Una iniciativa que cae tan de cajón que extraña que no se haya puesto de manera prácticamente unánime en los concellos turísticos.
Los empresarios dispondrán de contenedores específicos, que serán vaciados diariamente, seis días de la semana en horario de tarde, por una empresa que desplazará una furgoneta a los bares, hoteles y restaurantes participantes. Los contenedores tienen ruedas, lo cual facilita el transporte por las zonas peatonales. La iniciativa no se circunscribe a los establecimientos del centro de la localidad, sino que entre los 18 que han dado el visto bueno a esta forma de reciclaje hay establecimientos de parroquias como Oubiña, Castrelo o Corvillón, según confirmó el concejal Samuel Lago.
El servicio lo dispensará la actual concesionaria de la recogida de la basura, Urbaser, que ha llegado a un acuerdo con el Concello que permite que esta logística no tenga ningún coste para las arcas locales, algo que se aparecerá también en el próximo contrato del servicio, que el gobierno local está preparando.
La pretensión del gobierno local era que el servicio comenzara a funcionar a finales del pasado mes de enero, pero finalmente ha habido que esperar algunas semanas para firmar el contrato. A pesar de que la iniciativa se pondrá en marcha de manera inminente, asegura Samuel Lago que todavía hay hueco para que aquellos establecimientos hosteleros que se quieran sumar puedan hacerlo. Eso sí, apunta el concejal que la capacidad es limitada, por lo que quien desee apuntarse deberá hacerlo cuanto antes.
Beneficioso para las arcas
La medida supone una mejora en la gestión ambiental de los residuos, porque favorece el reciclaje y evita molestias como los malos olores en la vía pública, especialmente durante los meses de verano. Además, beneficia a la economía municipal, pues por cada tonelada que se evite mandar a la planta de Sogama se ahorran 70 euros.