El alcalde de Catoira afirma que el Concello cumplirá la sentencia
25 dic 2024 . Actualizado a las 20:50 h.Acompañado por representantes de la plataforma vecinal que durante tantos meses ha peleado para evitar la instalación de una pirotecnia en Coaxe, el alcalde de Catoira hizo ayer una valoración pública de la sentencia que confirma que el almacén es ilegal. Xoán Castaño, de hecho, utilizó gran parte de su intervención para alabar la oposición vecinal, algo que definió como «un movemento de dignidade fronte á bomba» y les agradeció su pelea por «loitar por un rural con futuro», dijo.
Fueron Nieves y Amparo, dos de las integrantes de la plataforma, quienes abrieron el acto para expresar su alegría tras el fallo del Tribunal Superior de Xustiza de Galicia, algo que, pese a que como ellas reconocen la sentencia es recurrible, les da mucha confianza en que todo acabe como esperan. En este sentido, el alcalde adelantó que el Concello cumplirá «escrupulosamente», lo que dice el fallo. Es decir, el edificio será demolido.
Cambio de criterio
«Eu non cambiei de opinión, o que cambiou de criterio foi o Concello», apuntó el nacionalista, refiriéndose a lo que había sucedido bajo el mandato del socialista Alberto García. La propia sentencia reconoce ese cambio de postura del Concello. Fue tras la llegada del BNG al gobierno cuando se realizaron nuevos informes técnicos que demostraron que las obras realizadas no eran compartibles con las normas subsidiarias de usos en suelo rústico porque no tenían un fin agrícola y no se correspondían con lo presentado en la memoria.
El alcalde de Catoira también aprovechó su intervención para recordar la actitud del Partido Popular. En su momento, cuando la Subdelegación del Gobierno autorizó la puesta en funcionamiento de la pirotecnia, los populares habían sido muy críticos con la actuación del regidor. «A promesa de cerrar a pirotecnia desaparece, pero xa cumpliu o seu obxectivo: situar a Castaño no sillón e no seu abultado salario», apuntaban entonces desde el PP, que aseguraba que ese asunto les había hecho perder las elecciones. «Esa pirotecnia fixo que Iván Caamaño non sexa hoxe alcalde», razonaban los populares, ya que les hizo perder 200 votos en una parroquia de 700 votantes. «Faltáronnos 37 votos para subir un escano máis». De hecho, el propio Caamaño acudió a la instalación para comprar unos petaros y demostrar de esta forma que estaba abierta. «Lonxe de pelexar por pechala, foron abrila. A carón de quen están? Deberían pedir perdón a toda a veciñanza de Catoira», concluyó el alcalde en referencia a la actuación de los representantes populares.