Tras la única baja de Vanesa Domínguez, el club busca dos refuerzos para apuntalar la próxima versión del actual subcampeón de grupo de la División de Honor Plata Femenina
12 jun 2023 . Actualizado a las 05:00 h.Camino del mes y medio desde la conclusión de la temporada, con una agridulce primera experiencia en una fase de ascenso a División de Honor Oro, el Asmubal Meaño tiene ya enfilada la construcción de la plantilla con la que encadenará, por primera vez en sus historia, dos campañas en la División de Honor Plata Femenina.
El subcampeonato firmado el pasado abril ha llevado a la directiva que preside Silvia Lobato a apostar por la continuidad. Empezando por la renovación del gran hacedor de un año de ensueño para un equipo recién ascendido como el meañés. Ratificado durante la eliminatoria de la fase de ascenso con el Handbol Mislata, el mosense Juan Manuel Costas Muñiz lleva ya meses aplicándose en la tarea de consolidar el proyecto del Asmubal Meaño. Y su prioridad ha sido poder volver a disponer del cien por cien de las trece jugadoras con las que alcanzó el segundo puesto final del Grupo A de la tercera categoría del balonmano femenino español. Un objetivo que se quedó a nada de alcanzar. Solo los planes personales de Vanesa Domínguez, ajenos al deporte y que la alejarán varios meses de Meaño, han impedido el pleno de Costas.
Por lo demás, en Coirón se han asegurado ya las renovaciones de Lorena Ligero y Lucía Caneda en la portería, las extremos Sabela Miniño, María Currás, Andrea Cores y Paula Rey, las pivotes Cárol Fajardo y María del Carmen Vera, la central Eli Méndez y las laterales Laura Miniño, Agustina Ballada y Sofía Arangio.
Juan Costas ha destacado la dificultad para conseguir mantener la práctica totalidad del bloque subcampeón, toda vez que «hubo tres o cuatro de nuestras jugadoras que tuvieron ofertas de Oro». Una dificultad que, subraya el preparador, se eleva a la hora de conseguir los refuerzos con los que pretende apuntalar una plantilla demasiado corta, limitación camuflada la pasada temporada por la fortuna de evitar lesiones de larga duración. «Antes éramos la segunda categoría y ahora la tercera y hay muy pocas jugadoras para tantos equipos», lamenta Costas.
¿Qué busca el técnico del Asmubal? Pues una tercera portera y una pivote especialista en la defensa del centro de la 6-0 con la que suplir el boquete dejado por la marcha de Vanesa Domínguez —el blindaje de la portería meañesa con su trabajo a la par de Cárol Ferreira fue una de las claves de la espectacular temporada del equipo—.
Regreso de Sineiro y Victoria
Además, Costas confía en reforzar su plantilla con dos jugadoras de la casa. La primera, Raquel Sineiro, una primera línea que marcaba diferencias mientras pudo jugar, con la que espera poder contar tras dejar aparentemente atrás tres tortuosos años de lesiones encadenadas en sus rodillas. La segunda, Victoria Domínguez, capitana del Asmubal hasta que la última campaña tuvo que mudarse a Salamanca por sus estudios de Farmacia; de vuelta a Galicia, Costas confía convencerla de que vuelva al equipo.